Cultivo

Además de las dos familias "estándar" dentro del cannabis, más conocidas como índica y sativa, existen otras menos frecuentes. Hasta ahora han sido muy poco o nada utilizadas en la crianza para producción de híbridos comerciales, limitándose su uso a la experimentación. Las dos principales, rudelaris y silvestre china están aceptadas taxonómicamente como de la familia. No sucede así con la ABC o Australian Bastard Cannabis, sobre la que existen dudas de que sea una familia de cannabis no categorizada.

La sutil idea de que las sativas son de algún modo plantas más sofisticadas viene del efecto de más subidón y más introspectivo, así como del modo en que crece la planta, trepando hacia arriba y alargándose la distancia intermodal y el tiempo de floración.

Cada año que pasa salen nuevos bancos de semillas nacionales. Muchos persisten en el tiempo pero otros simplemente desaparecen. Este es el caso de Landagrow, que desarrollaron dos de las mejores plantas que yo jamás haya probado: la Mistyc glue y la Hustland.

Con el ácido giberélico puedes aumentar sobremanera una cosecha de cannabis... o puedes cargártela sin remisión.

A lo largo de las siguientes páginas trataremos de exponer algunos de los aspectos fundamentales sobre la siembra y las semillas de nuestra planta favorita.

Segunda parte de este reportaje sobre bancos de semillas de todo el mundo.

Antes de nada, vamos a partir de una base: la principal diferencia entre pillar semillas de 15 ó 20 euros el sobre/tubito/cajita y pillarlas de 40 ó 50 euros/ídem (y no hablemos de 80 ó 100, ó incluso más) es que lo más posible es que las caras germinen todas o casi todas, mientras que entre las baratas te puede pasar casi de todo.

El Cannabis, al ser una planta, puede reproducirse de manera sexual, por medio de la polinización, y asexualmente, mediante el uso de ciertos órganos de la planta, los tallos, que son capaces de formar nuevas raíces dando lugar a nuevos ejemplares (esquejes o clones) idénticos genéticamente a la planta original.

Extenso artículo sobre los mejores bancos de semillas de todo el mundo.

Los lectores de nuestra revista, y buena parte de porreros de pro, saben las ventajas del autocultivo. Entre ellas, aparte de no depender de ningún camello de escaso nivel en fiabilidad e higiene personal y de gestionar tú mismo la calidad de lo que te fumas, hay una fundamental: elegir tú mismo las modalidades de cannabis que cultivarás por tus propias preferencias de sabor, aroma, efecto, producción, plazos de cosecha...