Bajar la temperatura en un cultivo de interior

Hola, soy Carlos de Sevilla:

Si bien Sevilla tiene un color especial, según la canción, el calor en verano aquí es de la muerte. Este es el segundo verano que intento cultivar y otra vez la he cagado con el calor. Me comentan que la única manera de cultivar en interior por aquí es con aire acondicionado y la verdad es que con la bajada de precios me estoy pensando poner uno, pero ¿son realmente efectivos para 4 ó 5 lámparas? Gracias de antemano.

Hola Carlos:

Efectivamente, hasta hace un par de años, los aparatos de aire acondicionado tenían unos precios escandalosos y salvo los muy caros, el resto requería de complicadas instalaciones y todo resultaba bastante “aparatoso” para un simple cultivo para autoconsumo. Sin embargo, en los últimos tiempos han aparecido modelos con unos costes más que razonables y que se instalan en menos de una hora, además de sistemas “portátiles” o móviles realmente eficientes. Vamos a ver qué es lo más adecuado para un indoor medio, pero antes es conveniente conocer el funcionamiento básico de un aparato de aire acondicionado.

Así pues, existen básicamente dos tipos de sistemas de aire acondicionado, los que producen la refrigeración por humidificación y los que lo hacen mediante un compresor y líquido refrigerante. El enfriamiento por humidificación se basa en hacer circular el aire del habitáculo forzándolo a pasar a través de una cortina de gotas de agua en suspensión manteniendo así la humedad a un nivel alto e impulsando el aire seco al exterior. De esta manera se consigue rebajar la temperatura del habitáculo entre 5 y 10 grados en relación con la del exterior. Necesitan una toma externa de agua y es conveniente que ésta se encuentre lo menos calcificada posible, ya que si no, se obturarán los filtros y conductos con suma rapidez.

Como podemos apreciar, si lo que deseamos es un sistema de climatización con un funcionamiento garantizado y que no nos eleve la humedad, cosa nada recomendable para nuestros cultivos, el sistema expuesto no es el más recomendables para su uso en España, debido a la considerable pérdida de rendimiento que sufren en climas calurosos y/o húmedos como valles o playas, por lo que debemos estar atentos y evitarlos a pesar de que suelen ser más económicos que los sistemas clásicos, es decir, con compresor y gas o líquido refrigerante.

Estos climatizadores a compresor funcionan de forma similar a los aparatos industriales estando recomendados para todo tipo de climas. Incorporan un sistema de deshumidificación que hacen más confortables las estancias en lugares húmedos y pueden funcionar con temporizador y termostato. Algunos modelos también disponen de un kit o “bomba” de calor para invierno. Su mayor inconveniente está en que su consumo, según el modelo, puede ir de 450 a 1800 w (de 11 a 32 A. en el arranque), por lo que habrá que tener en cuenta este dato a la hora de calcular los costes del cultivo. Todos los aparatos actualmente comercializados en España están libres de gases perjudiciales para la capa de ozono (CFCs y HCFCs).

Por último, están los aparatos llamados “portátiles” o “móviles” que son de un tamaño razonable, tienen ruedas y se pueden llevar de un lado a otro sin mayor inconveniente. No confundir con los sistemas de cortina de agua que comentábamos al principio sino que se trata de verdaderos sistemas de aire acondicionado con su compresor y su circuito de gas todo integrado en el mismo aparato y por un precio de alrededor de los 200 euros, precio más que asequible, teniendo además en cuenta que lo podremos utilizar en cualquier época del año y en cualquier lugar de la casa. Con uno pequeño, de 1.800 frigorías podemos tranquilamente climatizar 9 m2 de indoor, manteniéndolo en 25ºC con una temperatura ambiente de alrededor de 40º.

Esperamos haberte ayudado. Un fresco saludo.