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Los minadores de hojas y sus enemigos

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Los minadores de hojas son una plaga que afecta a los cultivos comerciales bajo plástico en todo el mundo, con mayor frecuencia en zonas templadas.

Introducción

En Canarias este año 2008 han resultado ser la plaga más destacada por su elevada incidencia en los cultivos de exterior, comparando con los datos obtenidos en años anteriores. Ver [3], [4] y [6]. No es frecuente, pero estos insectos tan polífagos pueden generar en determinadas condiciones, una plaga para los cultivos de cannabis de exterior e invernadero; En ocasiones alcanzan los cultivos de interior.

Los minadores de hojas son unas pequeñas moscas (Orden: Diptera) pertenecientes a la familia Agromyzidae. Éstas depositan sus huevos en el interior de las hojas; al eclosionar, emergen las larvas que practican las galerías o minas (en el interior de las hojas) que dan origen a su nombre.

Existen varias especies de minadores de hojas pero las más comunes en los cultivos de cannabis son: Liriomyza trifolii, Liriomyza broniae, Liriomyza cannabis, Liriomyza strigata y Liriomyza huidobrensis.

Ciclo biológico y morfología

El ciclo biológico del género Liriomyza consta de los siguientes estadios:

Huevo. El tamaño varía entre 0.10-0.25 mm. de longitud, es de color crema, y de forma más o menos ovalada según la especie. Los huevos son depositados en el interior de las hojas.

Larva. Los minadores pasan por tres estados larvales desde su eclosión. Durante todo su desarrollo las larvas permanecen en el interior de las hojas alimentándose y realizando minas.
 
Pupa. Al final del estado larval, los individuos rompen las hojas dejándose caer al suelo o en el sustrato a varios centímetros de profundidad para realizar el estadio de pupa. También lo pueden hacer en la superficie del sustrato, en el envés y en casos muy esporádicos en el haz de las hojas.

Adulto. Los adultos son pequeñas moscas cuyo tamaño medio oscila alrededor de los 2mm aproximadamente. Los machos suelen ser más pequeños que las hembras, las cuales pueden alcanzar los 2.5mm de longitud. El color del cuerpo de los minadores adultos es negro y amarillo. 

Desarrollo de la población

Una hembra de minador puede poner a lo largo de su vida (unas dos semanas aproximadamente), centenares de huevos en condiciones óptimas de temperatura. Las condiciones climatológicas, son determinantes para la expansión de las poblaciones de los minadores. Las condiciones de elevada humedad relativa son propicias para la ovoposición, pero al igual que para otros insectos, es la temperatura ambiental la que verdaderamente influye en el desarrollo de la población. El desarrollo huevo-adulto puede extenderse unos 25 días a 20º C y más de 15 días a 25º C de temperatura.

Otro factor influyente en el desarrollo de poblaciones de minadores de hojas en los cultivos de cannabis es la variedad de cannabis cultivada; algunas variedades son más apetecibles que otras.

En general estos insectos no suelen generar importantes plaga en el cannabis en interior, mientras que en los cultivos de exterior e invernadero en las regiones subtropicales son cada vez más frecuentes.

Daños causados por los minadores de hojas

Las larvas son las responsables de los daños a las plantas al realizar minas o galerías en las hojas. Éstas son muy activas durante todo su desarrollo, se abren camino en el interior de las hojas con sus piezas bucales del tipo masticador.

Normalmente, las larvas se mueven en el interior de la hoja donde se han depositado los huevos, pero pueden desplazarse inclusive a través del peciolo cuando la fuente nutritiva no es suficiente.
Las minas dan como resultado la destrucción de los órganos fotosintéticos de la planta.

Las hembras adultas también dañan a la planta, realizando las llamadas punteaduras de alimentación y punteaduras de puestas en las hojas. Las punteaduras son perforaciones que realizan sólo las hembras adultas en el haz de las hojas. El macho no posee aparato perforador y por tanto se alimenta de las punteaduras realizadas por sus compañeras.

Las moscas minadoras de hojas aparecen de manera espontánea en las plantas de los cultivos de exterior y también en los invernaderos donde pueden encontrar condiciones climatológicas óptimas para su expansión.

En los cultivos de interior no son tan frecuentes los ataques, ya que su entrada en las instalaciones es más complicada. En el caso de observarse ataques, la identificación de estos insectos es sencilla: las minas y las punteaduras de alimentación y de puestas indicarán su presencia. La eliminación de las hojas infectadas resolvería el problema a pequeña escala.

La prevención es más compleja para los cultivos de exterior, ya que las plantas están expuestas al ataque de estos insectos, aunque normalmente suelen causar algún que otro ataque. En condiciones climatológicas y varietales favorables estos insectos pueden llegar a formar verdaderas plagas. En los invernaderos, las mallas anti-insectos deben emplearse para reducir la entrada en las instalaciones. Tratamientos con aceite de neem y extracto de ajo pueden resultar bastante eficientes como repelentes. Para más información sobre los minadores ver [1], [2] y [5].

Enemigos naturales de las moscas minadoras

La búsqueda de agentes biológicos en el control de las moscas minadoras en la agricultura comercial ha sido promovida por la elevada resistencia a los insecticidas que crean determinadas especie de Liriomyza. Además muchos de los insecticidas empleados causan problemas a sus enemigos naturales y a los de otras especies fitófagas como las moscas blancas.

Los enemigos naturales comerciales más comúnmente empleados son las avispas parasitas Diglyphus isaea, Dacnusa sibirica y Opius pallipes. La naturaleza, ofrece claramente una mayor variedad de enemigos naturales, algunos de éstos pueden presentarse espontáneamente en los cultivos de exterior asociados a la plaga.

Actualmente la aplicación de estas soluciones naturales es práctica común en muchos cultivos comerciales; esta técnica se esta extendiendo entre los cultivo de cannabis de invernaderos y exterior. Como todas las avispas parasitas, éstas prefieren el estadio larval de su hospedador.

El parasitismo realizado por avispas Diglyphus isaea es etcoparasitismo, es decir, el huevo se pone cerca del huésped (larva del 2º a 3er estadio), la larva al nacer entra en el cuerpo del huésped.
Las avispas Dacnusa sibirica y Opius pallipes son endoparásitas, es decir, el huevo se introduce directamente dentro del cuerpo de la larva huésped. Un depredador muy eficaz en el control de las moscas minadoras es la chinche Macrolophus caliginosus, pero de éste hablaremos en otra ocasión.

En el presente artículo nos centraremos en conocer un poco mejor, a uno de los parásitos de las moscas minadoras más importantes; probablemente por que su eficacia está avalada por más de veinte años de uso en lucha biológica en los cultivos comerciales de todo el mundo, ésta es la avispa parásita Diglyphus isaea.


Ciclo biológico de las avispas Diglyphus isaea

Estas avispas originales de Europa, pertenecientes a la familia Eulophidae, se han extendido por todo el mundo a través del comercio de plantas y también debido a los años que se llevan realizando las sueltas comerciales controladas en zonas con problemas. Por este motivo es posible que aparezcan de forma espontánea en los cultivos de exterior o invernadero pero siempre asociadas a las plagas de minadores. Su empleo como agente de control biológico remonta a principio de los 80. Desde entonces se ha empleado en una gran multitud de cultivos en el control de los minadores. Frecuentemente, en las sueltas comerciales se emplean en combinación a otras avispas parasitas (Dacnusa sibirica y Opius pallipes) para reforzar el control.

Como se ha mencionado anteriormente, es un ectoparásito, lo que significa que tanto las puestas de los huevos como los demás estados vitales se realizan cerca, pero fuera, del cuerpo de la larva huésped.

El ciclo biológico de este parásito de los minadores consta de 4 estados vitales: huevo, tres fases larvarias, pupa y adulto.

Realizada la suelta de Diglyphus isaea comercial, se puede observar como los insectos liberados revolotean por el cultivo en busca de huéspedes para la puesta de los huevos.
Una vez localizada las víctimas (larvas de minador), las avispas hembras pican e inyectan una sustancia química paralizadora. Inmediatamente después depositan los huevos (uno la vez, y sólo uno por larva huésped) cerca del cuerpo paralizado del huésped. Del huevo depositado nacerá una pequeña larva que permanecerá continuamente cerca de su huésped paralizado. Esta larva realizará constantes picaduras de alimentación a su huésped que al poco tiempo terminará muriendo.

Las larvas de las avispas parásitas se dispersan por las galerías realizadas por las larvas de los minadores hasta encontrar un lugar adecuado para pupar. Finalmente el adulto, de color negro y verde metalizado, emerge de la pupa realizando un agujero redondo en la epidermis superior de las hojas.

Morfológicamente las hembras y los machos son muy parecidos. Se diferencian en el tamaño (las hembras son más grandes) y por los colores de sus patas.

Para distinguir esta especie de otras avispas parásitas de los minadores hay que recurrir a otras características distintivas de cada especie como la forma de las alas y la longitud de sus antenas. Nuestra especie Diglyphus isaea tiene antenas cortas y filiformes.

Desarrollo de la población

Como en todas las plagas la temperatura juega un papel fundamental en el desarrollo de las poblaciones de las avispas parasitas. Temperaturas superiores a los 20º C son la deseada para un óptimo desarrollo para estos enemigos naturales de los minadores.

La temperatura también gobierna la puesta de estos insectos, a 25º C se pueden poner más de 15 huevos por hembra al día. Por tanto una hembra en condiciones óptima de temperatura puede poner casi 200 huevos en toda su vida, unos 10 días aproximadamente. El tiempo de desarrollo huevo-adulto a temperaturas de 25º C son de 10 días aproximados. Si comparamos la duración de los desarrollos huevo-adulto de los minadores y de los individuos de la Diglyphus isaea se puede ver claramente que los enemigos naturales evolucionan más rápido a temperatura iguales.

Parasitismo

La observación de las hojas puede indicar si hay parasitismo después de una suelta. Las larvas atacadas por la avispas, mueren, dejando como síntomas minas más cortas con cadáveres oscurecidos. Estas avispas practican el “host feeding”, es decir, no sólo necesitan de los minadores para realizar su ciclo vital, también se alimentan de ellos. Ya se vio que las larvas permanecen cerca del huésped para alimentarse de sus fluidos corporales, los adultos, especialmente las hembras, también se alimenta de las larvas, pero en este caso de primer y segundo estadio. Las larvas empleadas para alimentarse no se emplearan como huésped para la puesta del huevo.

Para más información sobre algunas de las avispas parásitas más comunes ver [1] y [2].

En el próximo número, “Las orugas y su control biológico”.

Agradecimientos: Claudia Santarosa (Dr. Grow´s Productions), África, y Fran y Eduardo (Koppert Canarias).

Referencias

[1] Malais M. H. y Ravensberg W. J. 2003. Knowing and recognizing, the biology of glasshouse pests and their natural enemies. Reed Business Information.
[2] McPartland J.M., Clarke R.C. & Watson D.P. 2000. Hemp diseases and pests. Management and biological control. CABI Publishing..
[3] Salami M. 2008. Plagas más frecuentes en los cultivos españoles durante el año 2007. Spannabis 2008, Dr.Grow´s Productions.
[4] Salami M. 2008. Incidencias de plagas en los cultivos de Cannabis sativa L. en las isla de Tenerife durante el año 2007. Propiedad de SMA Hidrocan S.L.
[5] Salami M. 2008. Cannabis sativa L. Dr.Grow´s Productions.
[6] Salami M. 2008. Incidencias de plagas en los cultivos de Cannabis sativa L. en las isla de Tenerife durante el año 2008. En preparación. Dr.Grow´s Productions.
 
Para más información:

Dr.Grow´s Productions
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Santa Cruz Tenerife
38004, Islas Canarias
Tel/fax: 822 016 127
info@drgrow.es
www.drgrow.es

Acerca del autor

Massimiliano Salami
Massimiliano Salami es escritor, autor del libro Cannabis sativa L., colaborador de Cannabis Magazine e investigador en el cultivo del cannabis. Licenciado en matemáticas, es técnico en gestión de empresas agropecuarias con amplia experiencia como breeder.

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