Los trips, ha sido hasta el año pasado la tercera plaga más importante en los cultivos de cannabis, especialmente en los cultivos de interior [5]; aunque, en los últimos años estos insectos también han evolucionado de manera importante en los cultivos de exterior [6].

En las Gráficas 1, 2 y 3 se puede observar la incidencia de éstos fitófagos en los cultivos de cannabis españoles, y su evolución, durantes los años 2006 y 2007.

Los trips que atacan al cannabis son especies polífagas, muy comunes en los cultivos agrícolas de todo el mundo, especialmente en los invernaderos donde encuentra condiciones ambientales óptimas para su reproducción.

Existen varias especies de trips que atacan al cannabis, y causan daños severos. Algunas de las especies dañinas para el cannabis son: Thrips tabaci, Frankliniella occidentalis, Heliothrips haemorrhoidalis, Oxythrips cannabensis, Caliothrips indicus, etc. afortunadamente ciertas especies sólo están delimitadas en determinadas zonas del planeta. Para más información consultar [1] y [2].

De todas las especies de trips que existen, dos son las más comunes en los cultivos españoles con una importante incidencia. Estas especies son el Thrips tabaci y la Frankliniella occidentalis. Estas especies son las que se estudiaran en este artículo junto con sus mayores enemigos naturales, las chinches del género Orius spp.

Morfología y ciclo biológico de los trips

Los trips son los insectos alados muy pequeños, normalmente no superan los 1.5mm de longitud, especialmente las especies que viven en la península Ibérica. Su diminuto tamaño facilita su ocultación, dificultando la labor de búsqueda. De hecho, una infección de trips se reconoce a primera vista por los síntomas causados a las hojas; los trips no forman colonias como los pulgones o las arañas rojas, en este aspecto son más solitarios.
Los trips pertenecen a la familia Thysanoptera, miembros de esta familia están extendidos por todo el mundo, la mayoría son inofensivos, pero algunas especies son perjudiciales para las plantas, e incluso existen especies que son depredadoras de otros trips. Para más información sobre la morfología externa e interna de los trips consultar [3].

El ciclo biológico de los trips consta de 6 estados vitales: huevo, dos estados larvales conocidos como L1 y L2, prepupa, pupa y finalmente el adulto.
Los huevos de los trips son diminutos, inapreciables, hasta difíciles de localizar con lupa. Éstos normalmente se insertan el interior de las hojas, protegidos de los depredadores. Ocasionalmente pueden ser puestos en el exterior del vegetal.
Del diminuto huevo nacen las larvas (L1), éstas se alimentan de los tejidos vegetales. Las larvas L1 son muy activas y precisan de muchos nutrientes para su metabolismo en pleno crecimiento. Para suplir sus necesidades nutritivas las larvas se alimenta casi continuamente hasta alcanzar la fase de L2. La principal diferencia entre las larvas L1 y L2 es el mayor tamaño de las últimas.
Cuando la larva L2 está lista para pupar, se deja caer al suelo (sustrato). Ésta puede penetrar varios centímetros por debajo de la superficie en busca de un lugar seguro para completar el ciclo vital. En ocasiones este estadio se realiza entre las instalaciones, aprovechando las grietas de los muros, en inclusive en el suelo. Durante esta fase el individuo no se alimenta y se mueve casi exclusivamente cuando es molestado.
El hecho de que los trips se refugien bajo suelo, para terminar su ciclo juvenil, complica enormemente la labor de control tradicional con insecticidas.
Las pupas son verdaderamente complicadas de localizar, son más grades que la larvas y tienen desarrollado los esbozos alares.
Los adultos son morfológicamente diferentes entre ello dependiendo de la especie. Los individuos de la especie Thrips tabaci son más pequeños y su color varía desde el amarillo hasta el marrón oscuro (frecuentemente con dos tonalidades).
Los adultos de la especie Frankliniella occidentalis son amarillos pero más pálido, aunque pueden ser marrón oscuro. La longitud media del cuerpo de un adulto es de 1.3mm.
Diferenciar las distintas especies de trips es una labor bastante compleja, para la rápida clasificación se debe recurrir al estudio de la cabeza, de las alas y de las antenas (Ver [1]), con la ayuda de un microscopio óptico.
La principal característica del los trips que los distingues de otros insectos y que da nombre a la familia que componen, es la forma de sus alas. Éstas son estrechas, alargada y con flecos pestañosos a los largo de los bordes de la alas.

La reproducción de los trips puede ser sexual o asexual dependiendo de la especie y de las condiciones ambientales.
En general las hembras fecundadas darán generaciones masculinas y femeninas, mientras que aquellas que no han sido fecundadas, dependiendo de la especie, dará solo generaciones masculinas o sólo femeninas. En el caso de la especie Thrips tabaci, donde poblaciones de machos son muy poco frecuente, la reproducción es asexual y las generaciones sucesivas sólo serán de hembras. En el caso de la especie Frankliniella occidentalis las hembras no fecundadas generan sólo poblaciones masculinas.

Desarrollo de la plaga y dispersión

Los trips son insectos típicos de las plantas de exterior, aunque su malignidad es mucho mayor en los cultivos de interior donde se reproducen sin barreras.
Los trips suelen entrar en los cultivos de interior y en los invernaderos a través de material infectado, aunque pueden acceder a éstos desde el exterior por las aperturas de aire y/o fisuras atraídos por la luz y los aromas que desprenden las plantas.
Los trips no son grandes voladores, sus alas flecadas les facilita realizar grandes saltos y planear con las corrientes de aire, pero no volar, por tanto la dispersión por el cultivo se realiza mediante saltos de hoja en hoja.
En un cultivo de interior la propagación de los trips es rápida, por la falta de enemigos naturales que frenen su desarrollo.

En general los trips suelen hacer su presencia en los cultivos de cannabis de exterior principalmente durante la primavera y el verano, en interior pueden aprovechar los cultivos de plantas madres para desarrollarse durante todo el año, y pasar a través de los esquejes a los cuarto de floración, invernaderos y exteriores.

La duración del desarrollo huevo-adulto para la especie Frankliniella occidentalis (obtenido de varios autores) es de de 13.72 días a 25ºC de temperatura ambiental. Puesto que, para la especie Thrips tabaci, la duración del desarrollo huevo-adulto es muy similar a la Frankliniella occidentalis (la media obtenida es de 13 días), se puede estimar que en poco más de dos semanas, a 25ºC, se forman nuevas generaciones de trips. Si el ciclo de cultivo de interior medio es de 12 semanas, suponiendo que la entrada de los fitófagos se hace con el material vegetal, a final de ciclo si no se ha controlado, habrá entre 5 y 6 generaciones alimentándose del cultivo.

El control de la climatología es una arma de gran poder que debe ser integrada en los planes para la lucha contras las plagas; como ejemplo se tiene que: ajustando la temperatura de la sala de interior entre 20-24ºC, retrasaría la duración del desarrollo huevo-adulto unos diez días aproximadamente, tiempo suficiente para organizar las sueltas de depredadores.
 
Las puestas de los trips oscila entre 70-100 huevos por adulto durante toda su vida, eso equivale a una media de 3 huevos diarios a 25ºC de temperatura. Las puestas que realiza la especie Frankliniella occidentalis es muy parecida a en números a la de la especie Thrips tabaci.

Los trips en general tienen una vida media de 35 días dependiendo de la temperatura. Temperaturas superiores a los 30ºC son negativas para los trips, aunque se reproduzcan más rápidamente su mortalidad es bastante más elevada.
 
Los trips suelen refugiarse en el envés de las hojas, cobijados cerca de las venas, protegidos de las condiciones adversas y predadores. Aunque la localización exacta depende de la especie, los individuos de Frankliniella occidentalis son más fáciles de observar en las partes altas de las hojas.

Daños

Las trips son famosos por los daños que causan, daños directos por alimentarse de las plantas, e indirectos por ser vectores de enfermedades como los virus.
A diferencia de los homópteros como las moscas blancas, los pulgones, las cochinillas etc., que se alimentan de la savia elaborada, los trips fitófagos del cannabis se alimentan de los contenidos celulares normalmente del tejido epidérmico de alas hojas. Primero perforan los tejidos más superficiales, para luego chupan sus contenidos. Como causa de esto, las células afectadas mueren, tornandose de un color plateado, sintomatología típica de infecciones de trips. Además de estos síntomas tan significativos, aparecen asociados a las manchas plateadas unos puntos negros que corresponden con los excrementos depositados por estos fitófagos.
Los daños causados al vegetal son irreparables, y cuando la infestación es moderada el metabolismo de la planta puede quedar perturbado: aumenta la transpiración cuticular por las heridas, disminuye la capacidad fotosintética, hasta la respiración celular se ve claramente afectada.
Además del daños directo, los trips son importantes transmisores de enfermedades víricas de las plantas, por tanto su control como plaga, previene también la aparición de enfermedades no deseadas.
Las heridas causadas por la forma de nutrirse que tienen los trips pueden ser también aprovechadas por otros patógenos “oportunistas”, como la Botrytis cinerea, para penetrar y desarrollarse sobre la planta.


Orius spp. “la chinche asesina”

Los enemigos naturales de los trips más eficientes son las chinches depredadoras o chiches asesinas Orius spp. Las chinches son hemípteros pertencientes al suborden Heteroptera.
Los orius están extendido por todos el mundo, aparecen durante la primavera asociados a colonias de insectos plagas como los trips, frecuentemente entre las flores.
Los orius son chinches muy polífagas, puede alimentarse de diferentes artrópodos pero también pueden sobrevivir con polen e incluso savia de las plantas. Para alimentarse de esta forma del vegetal debe picarlo, esta acción es esporádica y no perjudican al vegetal.

Existen unas 70 chinches del género Orius que puede actúan de depredadoras de muchas plagas del cannabis.
La recogida en el campo de estos insectos para su posterior suelta en el cultivo es viable y aconsejada, pero en cualquier caso las sueltas comerciales suelen ser más prácticas, efectivas: éstas se realizan desde principio de los 90 en la agricultura comercial.
Las especies comerciales más importantes empleadas en la lucha contra el trip son el Orius majusculus y principalmente el Orius laevigatus.


Morfología y ciclo biológico

 
El ciclo biológico de los Orius majusculus y Orius laevigatus consta de 7 estados vitales: Huevo, cinco estadios ninfales y el adulto.
Los huevos son depositados en el tejido epidérmico de las plantas, el las venas, peciolo, etc., el lugar exacto depende de la especie. Aunque la puesta suele ser individual veces son puestos en grupo.

El color de las ninfas varia en función a la especie, edad pero generalmente van desde el amarillo hasta el marrón claro.
Una característica del género Orius son sus ojos rojos visibles en todos los estados vitales, aunque son bien visibles en las ninfas al contrastar con la clara coloración del cuerpo.
Las ninfas carecen de alas, son muy activas y cazan casi continuamente.
Los esbozos alares son visibles en el quinto estado ninfal antes de emerger como adulto.

Los adultos son oscuros con áreas mas claras, pueden alcanzar lo 3mm de longitud dependiendo de la especie. En general los individuos hembras suelen ser mayores que los machos.
La especie Orius majusculus es mayor que la especie Orius laevigatus.


Desarrollo de las poblaciones

Al igual que para los demás insectos, las condiciones ambientales, y la fuente de alimento son factores limitantes para el desarrollo de las chinches depredadoras de trips.

Las puestas de los Orius spp también son favorecidas por las temperaturas agradables, a 25ºC las hembras pueden depositar más de 150 huevos durante toda su vida.
También la longevidad de las chinches aumenta con estas temperaturas, la media es de 45 días. En cambio las temperaturas elevadas aumentan la mortalidad de los adultos acortando su vida, aunque favorezcan la eclosión de los huevos. Una situación parecida ocurre con los trips.
A diferencia del Orius majusculus, el Orius leavigatus no entra en dipausa al disminuir las horas de luz, por eso su aplicación es más frecuente.
El Orius majusculus es un gran depredador de trips, por eso se recomienda aplicarlo en exterior o invernadero durante la primavera y el verano, cuando las horas de luz solar están aumentando.

Comportamiento de los Orius spp

En condiciones climatológicas normales las chinches pueden depredar unos 10 individuos de trips diarios.
En algunos estudios comerciales se indica que los individuos de la especie Orius leavivagutus precisan de polen para poder desarrollarse completamente, especialmente si la suelta es preventiva; puesto el cannabis para la producción de inflorescencias no produce polen, la introducción puede ser más compleja pero no imposible.
En ensayos realizados sobre el cannabis, se ha podido constatar que las chinches depredan muy bien en todas las fases de cultivos, especialmente en vegetativo. En floración con una infección suave, una sola suelta es suficiente para proteger el cultivo durante toda la fase.
En los cultivos de madre se ha podido instalar colonias de Orius spp comerciales, aun en ausencia de polen. Su supervivencia puede ser debida a su polifagia.

Un detalle curioso es que los Orius spp son chinche asesinas, es decir, no sólo depredan para alimentarse. Éstas pican sus presas, le inyectan saliva con una elevada carga enzimática que descompone los órganos internos y posteriormente extrae los fluidos parcialmente degradados succionándolos con su estilete. Estos depredadores se alimentan de todos los estados vitales de los trips.

Las ninfas de la chinches son muy activas, al igual que los adultos, se mueven muy rápidamente por el cultivo. Las Orius spp suelen refugiarse debajo de las hojas, entre las venas, entre los brotes nuevos, en los peciolos, entre las estípulas, etc.

En general, los Orius spp. son agentes de control muy eficaces, pero para poderlo introducir debemos garantizar la existencia de alimento, la ausencia de alimento alternativo no permite la suelta preventiva.
Las aplicaciones de sueltas comerciales (Thripor® de Koppert Biological Systems) son más comunes y efectivas, que la recogida de estos agentes en el campo y su posterior suelta, especialmente si el cultivo a tratar es de interior.
En estudios realizados en colaboración con Koppert Canarias, indican que es necesario liberar entre 1-10 individuos de Orius laevigatus por metro cuadrado para conseguir un óptimo control dependiendo de la gravedad de la infestación.
Cantidades mayores y repeticiones de las sueltas pueden ser necesarias durante el período de floración, o dependiendo de las gravedad de la infestación.
Los resultados son visibles a partir 7 días de las suelta.

Teniendo en cuenta que el cultivo del cannabis es un cultivo corto, y que las condiciones ambientales de los cultivos de interior son favorables para los trips, las sueltas con depredadores deben ser realizadas lo antes posible, es decir, en cuanto se aprecien los primeros síntomas.

Actualmente se emplea la lucha combinada de Orius spp y de los ácaros Amblyseius swirskii para el control de los trips en el cultivo del cannabis sin olvidar los beneficios de los ácaros en control de otros fitófagos importantes como las moscas blancas.

En el próximo número, una plaga cada día más frecuente en los cultivos de interior, las moscas del mantillo.

Agradecimientos: Claudia Santarosa (Dr. Grow´s Productions), Alberto de Arriba (Vulkaniaseeds), Eduardo y Fran (Koppert Canarias).

Referencias

[1] Malais M. H. y Ravensberg W. J. 2003. Knowing and recognizing, the biology of glasshouse pests and their natural enemies. Reed Business Information.
[2] McPartland J.M., Clarke R.C. & Watson D.P. 2000. Hemp diseases and pests. Management and biological control. CABI Publishing.
[3] Richards O.W. & Davis R.G. 1984. Tratado de entomología Imms. Vol. 2: Clasificación y Biología. Ed. Omega.
[4] Salami M. 2007. Incidencias de plagas en los cultivos de Cannabis sativa L. en las isla de Tenerife durante el año 2006. Propiedad de SMA Hidrocan S.L.
[5] Salami M. 2008. Plagas más frecuentes en los cultivos españoles durante el año 2007. Spannabis 2008, Dr.Grow´s Productions.
[6] Salami M. 2008. Incidencias de plagas en los cultivos de Cannabis sativa L. en las isla de Tenerife durante el año 2007. Propiedad de SMA Hidrocan S.L.
[7] Salami M. 2008. Cannabis sativa L. Dr.Grow´s Productions.
[8] Salami M. 2008. Lucha biológica contra las moscas blancas. 34-40., Spannabis Magazine nº 52.

Acerca del autor

Massimiliano Salami
Massimiliano Salami es escritor, autor del libro Cannabis sativa L., colaborador de Cannabis Magazine e investigador en el cultivo del cannabis. Licenciado en matemáticas, es técnico en gestión de empresas agropecuarias con amplia experiencia como breeder.