Cannabis Magazine 199

4 Imagen de portada: Redacción Director y maquetador: Agustín Lacalle Calderón Redactor jefe: Xosé F. Barge Contenidos y edición web: Raúl del Pino Publicidad: Manuel Álvarez / Patricia García Colaboradores: A. Flores Verdes, Claudio Vidal, Darius, Ed Rosenthal, Eduardo Hidalgo, estudio jurídico Brotsanbert, Fernando Caudevilla, Ferenz Jacobs, Gato, Germán Carrera, Gospodín Konopí, Isidro Marín, Javier Diz, Jose Carlos Bouso, Josetxo, Leslie Bocskor, Lupe Casillas, Macrohuana, Mari SH, Marqués de Esquilache, Michael Moldrickx, Mónica Hinojosa, Neal C. Borroughs, Nina Slick, Noucetta Kehdi, Pedro Heredia, Rafael Agulló, Raro Genetics, Valeria Vegas, Víctor G. Romano, Víctor Bataller, Wernard Bruining, William Texier, Xavier Vidal y Zoe Berriatúa Redacción y publicidad: Ap. de correos 25086 28080 Madrid - ESPAÑA Tel.: +34 91 658 45 20 Fax: +34 91 790 38 98 www.cannabismagazine.es [email protected] Edita: Feria del Cáñamo, S. L. Imprime: Monterreina Distribuye: Logintegral 2000, S.A.U. Tfno. 91443 50 00 - www.logintegral.com Dep. Legal: M. 50.048-2004 ISSN: 1889-5158 Miembros del consejo editorial: Agustín Lacalle, Raúl del Pino y Xosé F. Barge Recepción y aceptación de originales: un mes y medio antes de la publicación se reciben y quince días después se confirma la aceptación. Sistema de arbitraje: los artículos recibidos pasan por el proceso de selección del consejo editorial para ser posteriormente valorados por Isidro Marín, evaluador externo. Todos los artículos publicados en esta revista son originales e inéditos. Si quieres ponerte en contacto con nosotros: [email protected] espués de nueve largos meses, parece que podemos despe- dir este 2020 con alguna que otra noticia alentadora. La llegada de diferentes tipos de vacunas, con distintos tipos de respuestas inmunes y porcentajes de efectividad, todos ellos muy elevados, parece que nos dará un respiromás pron- to que tarde. Si todo sucede como debería, es probable que, para mediados del año que entra, la nueva normalidad sea más normal de lo que nunca hubiéramos imaginado. Son muchos los ciudadanos que valoran todas estas noticias con cau- tela. Después de los confinamientos, los desconfinamientos y los semiconfinamientos y confinamientos selectivos, la situación no está para muchas celebraciones. En lo que respecta al cannabis, que para la mayor parte de nuestro sector ha pasado de ser su prioridad para dejar espacio a la pandemia global, Unidas Podemos ha cumplido su palabra y propondrá el deba- te de regulación en la segunda mitad de la legislatura. Sin embargo, hace solo unos días, el PSOE lanzaba la perorata de siempre: “no hay evidencia científica”. Serán muchos los científicos y profesionales de la salud que les dirían que la ingente cantidad de casos supuestamente anecdóticos ya superan con creces a cualquier estudio al respecto, pero es que, además, hay mi- les de estudios esperando a que los “expertos” del PSOE se los lean. Algo que llevamos repitiendo años desde estas líneas es que el PSOE arrastra muchos de los problemas no solventados durante la transición, y es más un partido con pose progresista que uno verdaderamente avan- zado, renovador o reformista. Evidentemente, estas nefastas declaraciones, absolutamente infun- dadas, han hecho que diferentes tipos de pacientes que son usuarios de cannabis con fines terapéuticos se enfaden, considerablemente, con el ejecutivo. Ya no es que más de una decena de países lo hayan regula- do (digo yo que lo habrán hecho por algún motivo), tampoco se trata simplemente de que el Gobierno diga estas sandeces mientras permi- te el cultivo y la exportación de cannabis al extranjero, sino que se trata de varios millones de pacientes con dolor que piden, simplemente, que el cannabis sea una opción más. Ojo a las palabras literales, expresadas como respuesta parlamentaria al PNV: "Cuando se revisan las pruebas científicas sobre el uso terapéu- tico del cannabis (consumo directo de las sumidades floridas o con fruto de la planta de cannabis), se observa que el nivel de evidencia disponi- ble no es suficiente para recomendar un uso generalizado en pacientes con determinadas patologías, contrariamente a lo que podría pensarse". Curiosamente, su socio de gobierno, Unidas Podemos, habla abierta- mente sobre la iniciativa que comentábamos al comienzo del editorial: “Es un proyecto que prevé todo el ciclo productivo en relación con el can- nabis, pero todavía quedan algunos flecos que estamos cerrando, como el uso del cáñamo industrial”. Cuando se les pregunta sobre la previsión temporal, Unidas Podemos dicen que el tiempo de implantación de una posible ley es incierto, y que el mapa de apoyos parlamentario tampoco está nada claro. En resumidas cuentas, todavía queda mucho por remar, queridos lec- tores. Esperemos que 2021 nos traiga buenas nuevas y un aumento de la actividad económica, y que esto nos permita preocuparnos por algo más que por nuestra propia subsistencia. ¡Os deseamos feliz navidad y próspero 2021! D Editorial

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