el consultorio cannábico no fertilizar o añadir calcio de forma artificial en estas fases iniciales. Lo mejor es esperar para utilizar fertilizantes, al menos, hasta que las plántulas hayan crecido hasta una altura de unos quince centímetros. Iniciada la fase vegetativa de la planta, y en torno a la cuarta semana de vida de tus plantas, puedes empezar a abonar. Durante esta fase, las plantas tendrán necesidad de un fertilizante rico en nitrógeno, pero no de unas grandes cantidades de calcio, sinomás bien niveles moderados del elemento. Justo antes de comenzar la floración será el momento en quemás calcio necesiten las plantas, pues pegan un buen estirón, como los niños en la adolescencia, y será importante la disponibilidad de calcio ymagnesio para que crezcan robustas y vigorosas. Cuando lleguen a la floración, seguirán necesitando calcio para engordar las flores, pero en menor medida que en la prefloración. El mejor consejo para dar con la dosis adecuada es elegir bien los fertilizantes (siempre ecológicos) adecuados para cada etapa y respetar escrupulosamente las indicaciones del fabricante. Nunca uses el “ojo de buen cubero” para medir el abono, el chorrito echado a mano alzada a veces llena el culínde un vaso y, otras medio vaso. La carencia de calcio y sus síntomas Ante una carencia de calcio, y precisamente por su naturaleza de nutriente inmóvil, la sintomatología que alerta del desequilibrio, será primero perceptible en los brotes más jóvenes de la planta. Es por eso que, si miras con atención, podrás ver que son precisamente las partes más nuevas de la planta las que primero muestran la curvatura de las hojas hacia adentro (se rizan), y las manchas irregulares con colores marrones amarillentos en los bordes y superficie de las hojas. Quizás, si tienes algo de experiencia, te hayas percatado de que, de unmodo más sutil, el crecimiento de las plantas se ha ralentizado, algo que puede observarse especialmente en las flores y que puede disminuir la cosecha considerablemente. También, aunque no puedas verlo, las raíces han comenzado a retraerse. Todos estos son los síntomas de una deficiencia de calcio. Esta escasez del nutriente se da de forma común en cultivos hidropónicos, pues el sustrato es inerte o inexistente, y está muy relacionada también con el cultivo en suelos ácidos. Los niveles ideales de pH del sustrato para la correcta asimilación del calcio van desde un pH del 6,5 a un pH de 7, si cultivas en sustrato terrestre, como es tu caso. Si cultivas de forma hidropónica, el pH correcto es entre 5,4 y 6. Por ello, si usas agua de osmosis inversa puede ser recomendable agregar algo de calcio. Puede suceder que la deficiencia de calcio haya sido provocada por el sistema de iluminación que usas para tu cultivo indoor, si has optado por emplear luces LED. Estas luces, a pesar de sus beneficios, tienen un espectro de luz más pequeño y es probable que las plantas necesiten longitudes de onda mayores para la generar calcio de forma correcta. Cómo remediar la carencia de calcio El mejor modo de evitar la deficiencia de calcio antes de que suceda, es seleccionar un sustrato adecuado, comprar una mezcla rica en calcio o elaborar la tuya propia. Si detectas la deficiencia de calcio, puedes solventarlo añadiendo caliza dolomítica y agua. La dolomita ayuda a equilibrar los niveles de pH a la larga y es una opción sostenible. Como la deficiencia de calcio puede provocar o estar asociada a otras carencias de nutrientes (magnesio y hierro), es recomendable aplicar una solución de calcio-magnesio, que reforzará los niveles rápidamente. También puedes optar por la aplicación foliar de Ca con un pH 7,2 sobre las hojas afectadas (las más jóvenes), mientras agregas calcio ymagnesio al agua de riego. Ante una deficiencia de calcio, una solución rápida es el nitrato de calcio o Ca(NO3)2. No debes usarlo durante la floración (tiene demasiado nitrógeno), pero puedes agregarlo al agua, lo que facilita su absorción. Una vez que hayas tratado la carencia, realiza revisiones periódicas de la planta y mide habitualmente el pH del sustrato para asegurarte de que se mantiene en niveles óptimos. Y, sobre todo, nunca lo olvides, respetar al detalle las indicaciones acerca de las medidas que proveen los fabricantes de abono, será el mejor remedio para evitar este tipo de problemas. ¡Ojalá estas recomendaciones te sirvan para criar plantas sanas! ¡Mucha suerte! 46 Hojas curvadas por deficiencia de calcio en un banano (Scot Nelson, CC0 1.0, Flickr)
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