Drogas estimulantes como la MDMA, la cocaína, el speed o la cafeína son comúnmente utilizadas en contextos de fiesta paramantenerse despierto y enérgico a lo largo de la noche. La primera consecuencia negativa es evidente: se consuma o no, trasnochar pasa factura. Al alterarse el ciclo del sueño, sentimos fatiga y somnolencia durante el día y nos cuesta más dormir por las noches. Este desfase puede tardar hasta varios días en volver a regularse. Además, cabe destacar que, a largo plazo, la privación del sueño es muy perjudicial para la salud y está relacionada con todo tipo de afecciones físicas y psicológicas, desde problemas cardiovasculares o inmunitarios a trastornos mentales. Una vez se acaba la fiesta, el consumo de estimulantes puede hacernos imposible conciliar y mantener el sueño. Los consumidores saben bien lo molesto que puede ser “comer techo” durante horas después de una fiesta. Pero no siempre nos damos cuenta de las consecuencias negativas de los estimulantes en nuestro sueño. Algunos estudios sobre la cafeína muestran que incluso aquellas 97 “ “ DROGAS ESTIMULANTES COMO LA MDMA, LA COCAÍNA, EL SPEED O LA CAFEÍNA SON COMÚNMENTE UTILIZADAS EN CONTEXTOS DE FIESTA PARA MANTENERSE DESPIERTO Y ENÉRGICO A LO LARGO DE LA NOCHE
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