Este envase lo colocaremos en un lugar fresco y totalmente oscuro y lo agitaremos cada día de los cuarenta que debe estar macerando. Así facilitaremos que se desprendan todos los principios activos. Este proceso se puede llevar a cabo con materia vegetal picada o sin picar, aunque recomendamos usar la segunda opción ya que volatilizaremos terpenos mientras la picamos. Cuando lo hacemos con fines medicinales, debemos saber la cantidad que hemos aportado de cannabis en relación al aceite, para así calcular el contenido aproximado de cannabinoides en nuestro aceite enriquecido. También resulta importante analizar, aunque sea de forma doméstica, el material del que partimos. Nosotros solemos partir de flores para hacer esta maceración, ya que nuestro analizador no analiza el material ya picado o extracciones. Transcurridos los cuarenta días, filtraremos el preciado aceite para que contenga el mínimo de materia vegetal, ya que esta puede estropear el aceite. Por ello, es conveniente utilizar una malla de en torno a 200 micras para filtrar el producto final. Como os decíamos antes, si lo que queremos es potenciar, repetiremos el proceso hasta tres veces. A partir de la tercera vez, es probable que el aceite no sea capaz de absorber más cannabinoides o terpenos. Maceración en caliente Una vez tenemos claro cómo hacerlo en frío, os detallaremos cómo hacer lamaceración en caliente y cuáles son sus ventajas y desventajas (que alguna tiene), así como los utensilios que necesitaremos, que seránmás que en el macerado en frío (dos envases para el bañomaría, termómetro y espátula para remover). Comenzaremos el proceso poniendo agua a calentar. Para la maceración en caliente utilizaremos el baño maría, de manera que podamos controlar la temperatura. Sobre este pondremos el segundo envase para hacer el baño maría y agregaremos tanto el aceite como el cannabis. Lo mantendremos unas cuatro horas a 90 grados Celsius, una temperatura suficiente para activar los cannabinoides sin perder todos los terpenos. Durante estas cuatro horas iremos removiendo la mezcla. Transcurrido este tiempo, filtraremos la solución al igual que hemos hecho con la anterior maceración… ¡y ya tendremos listo este aceite! Al igual que en el método en frío, podemos repetir hasta tres veces el proceso para aumentar la concentración, aunque aconsejamos que el aceite se enfríe antes de volver a realizar la extracción. 58 “ “ CUANDO LO HACEMOS CON FINES MEDICINALES DEBEMOS SABER LA CANTIDAD QUE HEMOS APORTADO DE CANNABIS EN RELACIÓN AL ACEITE Otra opción es descarboxilar las flores y macerarlas en frío (llenando el recipiente) Preparando el baño maría Extracciones
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