Cannabis Magazine 248

El loto azul, también conocida como nenúfar azul o “flor de lis sagrada de las aguas”, cuyo nombre científico es Nymphaea caerulea, era una planta sagrada para los antiguos egipcios. Su flor solo vive un día. Se abre a la mañana, con el amanecer, y se cierra a la tarde, con la caída del sol para ahogarse en el agua para siempre. Pero además de símbolo del renacer solar diario, su vínculo con el sol partía de su forma misma. La flor cerúlea (como su nombre indica) está tocada en su centro por colores amarillos y hebras en color azafrán, lo que generó la creencia popular de que el sol nacía precisamente de la flor de loto. En lo cotidiano, la planta se usaba asimismo para la obtención de perfume. Su delicioso aroma era también muy apreciado, considerado el sudor de Ra, su esencia divina. Además, como mantienen multitud de expertos, por sus propiedades psicoactivas, derivadas de una composición química en alcaloides, podría haber sido usada para inducir sueños alucinatorios. Al visitar el arte egipcio, pronto puede hallarse que la flor de loto es un motivo habitual de representación, aunque, como veremos, gozaba de significados muy diversos e incluso poseía su propio hueco en las creencias funerarias que tanto han intrigado a todas las generaciones posteriores. Es precisamente gracias a las evidencias y, muy especialmente, a las manifestaciones artísticas que nos han llegado y que vamos a revisar aquí, que podemos determinar la naturaleza de la relación de esta cultura de la Antigüedad con el loto azul. Lotos azules (Pxhere, CC 0, Pxhere) 117 “ “ SU FLOR SOLO VIVE UN DÍA. SE ABRE A LA MAÑANA, CON EL AMANECER, Y SE CIERRA A LA TARDE, CON LA CAÍDA DEL SOL

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