Hace unos meses os hablábamos de variedades de cannabis con ratios 1:1 de THC:CBD. En este caso, nos adentraremos en el maravilloso y extenso mundo de las variedades CBD-rich o con altos contenidos en cannabidiol.
por Xosé F. Barge
¿Qué son las variedades CBD-rich?
La variedades CBD-rich son aquellas que, a diferencia de la mayor parte de semillas que se comercializan en la actualidad, expresan grandes cantidades de CBD, un cannabinoide que está demostrando un potencial medicinal que va mucho más allá de lo habíamos imaginado.
Cuando hablamos de “grandes cantidades” existe cierta ambigüedad, pero la verdad es que hay un amplio abanico de posibilidades. Desde variedades como Afghani #1 de Sensi Seeds, un clásico que ocupa un lugar privilegiado en las salas de cultivo de los más experimentados y constituye la piedra angular de muchos programas de crianza, arrojando, en algunos ejemplares, porcentajes de hasta un 3% de CBD y un 16% de THC; a Dancehall de Reggae Seeds, una genética mucho más actual que es capaz de expresar hasta un 14% de CBD y un 5% de THC.
En cualquier caso, las CBD-rich son todas aquellas variedades que expresan una cantidad considerable de cannabidiol, que se hace evidente en sus efectos.
¿Cuáles son las diferencias?
El CBD tiene entre sus propiedades la capacidad de contrarrestar la psicoactividad que aporta el THC. Por ello, simplificando la explicación, cuanto más alta sea la cantidad de CBD y más baja la de THC, menos efectos psicológicos y perceptivos experimentaremos.
Es simplista decir que, por ejemplo, una variedad con un 5% de THC y un 6% de CBD no es psicoactiva. Como hemos explicado en otros números de Cannabis Magazine, el efecto de variedades con porcentajes similares de ambos cannabinoides es complejo y conlleva leves percepciones cerebrales, sensación de liviandad y efectos físicos y paliativos evidentes. El “efecto cerebral” sí es ínfimo cuando hablamos de ejemplares de altos contenidos en CBD (en torno al 10%) y bajos contenidos de THC.
Lo ideal es que cada cual cultive y analice ejemplares en concreto (que no semillas, puesto que cada ejemplar arrojará ratios diferentes). Actualmente es la única forma de que encontremos la ratio adecuada para nuestro consumo, a no ser que queramos recurrir a las variedades estabilizadas 1:1-1:2, de las que ya hemos hablado extensamente en el número 121 de esta publicación.
¿Para qué sirve el CBD?
Aunque se trata de un campo de estudio en pleno crecimiento, podemos afirmar con rotundidad científica que estos son algunos de sus potenciales usos:
- Alivia el dolor.
- Elimina o reduce el crecimiento de bacterias.
- Reduce los niveles de azúcar en sangre.
- Reduce los vómitos y las náuseas.
- Reduce ataques y convulsiones en diversas enfermedades.
- Reduce la inflamación.
- Reduce el riesgo de obstrucción arterial.
- Inhibe el crecimiento de células cancerígenas.
- Ayuda en el tratamiento de la psoriasis.
- Actúa como un tranquilizante, evitando la psicosis.
- Alivia la ansiedad.
- Reduce los espasmos musculares.
- Promueve el crecimiento de los huesos.
- Reduce las contracciones del intestino delgado.
- Evita la degeneración del sistema nervioso.
Y estos algunos de los desórdenes o enfermedades en los que se está utilizando CBD en la actualidad:
- Infecciones resistentes a antibióticos.
- Artritis reumatoide.
- Psoriasis.
- PTSD.
- Ataques de ansiedad.
- Problemas musculares y vasculares.
- Diabetes.
- Alcoholismo.
- Espasmos.
- Esclerosis múltiple.
- Epilepsia.
- Dolor crónico.
- Esquizofrenia.
Resulta imprescindible especificar que estos efectos no siempre se producen a través del cannabis fumado o vaporizado (a veces es necesaria la aplicación tópica u otros tipos de administración) y, aunque los beneficios del CBD en estas afecciones han sido probados, no hay estudios lo suficientemente concluyentes ni aplicaciones lo suficientemente sólidas (en el caso del cáncer, por ejemplo) como para afirmar que podremos beneficiarnos de todos estos resultados con una administración encuadrada en el consumo habitual, y mucho menos a través de combustión.
La potencialidad del CBD crece cada día, junto a los centenares de estudios que se están llevando a cabo a lo largo de todo el mundo. Esperamos que muy pronto se generalice la regulación, puesto que esto llamará a muchas empresas a invertir en investigación, al hacerse evidente el beneficio económico que obtendrán a medio plazo.
¿Puedo usar variedades CBD-rich para tratar o paliar una enfermedad?
Como siempre cuando hablamos de cannabis y medicina, debe ser un médico que esté informado al respecto y familiarizado con la patología (con su evolución y pronóstico) quien hable concretamente sobre posibles usos.
En la actualidad, hay muchos médicos informados sobre los positivos efectos del cannabis y su viable aplicación en ciertas enfermedades de mal pronóstico, o como paliativo en algunas dolencias. El principal problema es que, pese a que muchos doctores conocen y han tutelado a pacientes que usan cannabis, muy pocos están familiarizados con el origen genético, las enormes diferencias y el potencial de las variedades con altos contenidos en cannabidiol.
Otra posibilidad es instar a estos profesionales a que profundicen un poco más en el tema o reunir a un conocedor de estas variedades con el doctor en cuestión. Los médicos serán las personas que mejor nos podrán informar sobre los riesgos de consumo, las formas óptimas de administración para evitar daños innecesarios o las verdaderas posibilidades y evidencias científicas de que estas genéticas puedan mejorar nuestra enfermedad.
¿Quién comercializa semillas CBD-rich?
Según diversas publicaciones, parece lo suficientemente contrastado que las genéticas que actualmente se están haciendo un hueco en el mercado como CBD-rich o ratio 1:1, parten de sendas creaciones de las casas de semillas Reggae Seeds y Resin Seeds.
En el caso de Reggae Seeds, son varias las genéticas comercializadas que expresan considerables contenidos en CBD: Dancehall, Dub, Respect, Session, Guayaka, Sra. Amparo, Blackdance y la famosa Juanita la Lagrimosa, una de las primeras genéticas en arrojar ratios 1:1 en sus ejemplares.
En el caso de Resin Seeds, Cannatonic y Dieseltonic son las variedades que ofrecen plantas con altos contenidos en cannabidiol.
En la actualidad, además de las variedades mencionadas, podemos adquirir genéticas estables 1:1 y 1:1-1:2 (THC:CBD) de CBD-crew y cualquier genética fruto de las colaboraciones que han llevado a cabo con las grandes casas de semillas (Dinafem, Dutch Passion, Barney’s Farm, Paradise Seeds, Grass’o’matic, Medical Seeds, etc.).
Durante los últimos meses han empezado a aparecer en el mercado nuevas variedades creadas por algunos de los mejores genetistas del mundo. Un buen ejemplo de ello es Compassion de Dutch Passion, una variedad de tendencia sativa que se expresa en ratios próximos al 2:1 (THC:CBD), rondando el 15% de THC y el 8% de CBD. En este caso, probablemente notemos más los efectos del THC si lo comparamos con una variedad 1:1, sin embargo, las grandes cantidades de CBD debieran controlar la psicoatividad de THC, produciendo un plácido efecto, a caballo entre las 1:1 y las variedades comerciales más comunes.
¿Un nuevo concepto de cannabis?
Sin duda, esto no es más que el principio. Las CBD-rich no solo pueden ayudar a la normalización, ofreciendo a cualquier tipo de consumidor (sea medicinal o no), un cannabis con muchos menos efectos secundarios y menos compromiso en relación al estado físico-psicológico que proporciona; sino que existe un evidente interés comercial en llevar a cabo variedades estables con diferentes ratios.
Es solo cuestión de tiempo que empiecen a comercializarse genéticas con los más variopintos porcentajes y relaciones. Y sí, probablemente estamos ante uno de los avances más importantes en lo que se refiere a la crianza de cannabis en años, así como un replanteamiento de los efectos asociados a nuestra planta amiga.
Es un momento apasionante, un punto de inflexión que aún no hemos digerido del todo ni se conoce lo suficiente, un cambio sustancial en el presente y en el futuro del cannabis.
Desde Cannabis Magazine, estaremos muy atentos a los avances científicos y comerciales al respecto y os mantendremos bien informados de cualquier novedad de relevancia.
Xosé F. Barge se licenció en Periodismo en la UPSA. Posteriormente realizó el grado en Humanidades y se especializó en literatura distópica del s. XX. Es el Redactor jefe de Cannabis Magazine y El Cultivador.
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