Entre los consumidores actuales y los ex-consumidores, el 16’4 % lo tomaron para los síntomas de su enfermedad, la mayoría de los cuales consideró que era “muy útil” para el alivio del dolor abdominal, las náuseas y la diarrea. Entre los que nunca lo habían consumido, la mitad estaría dispuesta a hacerlo si fuese legal. Los autores concluyen afirmando que “un número significativo de pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal actualmente consumen marihuana (… ). Se necesitan ensayos clínicos para determinar el potencial de la marihuana como terapia para la enfermedad inflamatoria intestinal y para protocolizar su prescripción”.
Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.