con el vaporizador electrónico por una carga del vaporizador manual. Sin embargo, seguimos con las diez dosis de cannabis al día. En cuanto al tabaco, redujimos la dosis a la mitad. Ahora fuma cinco cigarrillos al día, uno por la mañana, otro después de comer, otro a media tarde y dos más por la noche. Combina estos cigarrillos con las dosis de cannabis. En este caso, creemos que el CBD ayuda más que el THC para dejar de fumar, pero Antonio también buscaba el efecto psicoactivo y, psicológicamente, puede ayudar a los usuarios habituales a dejar la combustión. Al final de la semana, Antonio admitió que pensaba que lo pasaría peor, pero con el vaporizador manual, se estaba quitando la manía de tener algo en la mano. Tercera semana: crucial para dejar de fumar En esta semana, la única modificación que haremos es reducir la cantidad de tabaco de cinco cigarrillos liados a tres, utilizando un papel aún más pequeño. También redujimos la cantidad de cigarrillos comerciales de veinte a solo tres, sin que haya tenido ansiedad. El propio Antonio no se lo creía. En cuanto a la cantidad de cannabis, seguimos con las diez cargas diarias. Cuarta semana: el tabaco le empieza a resultar desagradable En la cuarta semana, Antonio se ve fuerte para dejar el tabaco de una vez por todas, así que nos pidió hacerse su propia rutina de vaporizadores y tabaco. Por supuesto, nos pareció bien, ya que nadie se conoce mejor que uno mismo. Sin embargo, le pedimos que lleve un control de cuánto vaporiza y qué vaporiza, así como la cantidad de tabaco que fuma. En los primeros días, siguió nuestro plan en cuanto a la dosificación del cannabis y solo fumaba dos cigarrillos al día, uno por la mañana y otro por la noche. Pero a medida que pasaban los días, aumentó la cantidad de vaporización Además de ser un consumidor medicinal, también lo utiliza de forma lúdica. Los cigarrillos empezaban a resultarle desagradables. Nos contó que se hizo uno y le duró una hora. Por lo tanto, habíamos llegado al punto en el que ya no necesitaba nuestra guía, ya que había dejado de fumar. Conclusiones Como hemos relatado, la vaporización puede ser una gran opción para dejar de fumar, siempre y cuando se sigan algunas pautas y no se haga de forma radical. Recomendamos utilizar un buen vaporizador para llevar a cabo este proceso, ya que uno de mala calidad puede no cumplir su función correctamente. Lo ideal es que algún amigo nos preste uno de calidad y, una vez que hayamos adoptado la rutina, adquirir uno propio, tal y como ha hecho Antonio, que se ha comprado un vaporizador electrónico portátil y otro manual por ciento cincuenta euros. ¡Yo vaporizo! 59 Vaporizador manual a medio uso “ “RECOMENDAMOS UTILIZAR UN BUEN VAPORIZADOR PARA LLEVAR A CABO ESTE PROCESO, YA QUE UNO DE MALA CALIDAD PUEDE NO CUMPLIR SU FUNCIÓN CORRECTAMENTE
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