Cannabis Magazine 234

club se considera más una asociación cultural que una mera agrupación para el consumo. De hecho, ya nos ha propuesto organizar varios talleres sobre consumo responsable y técnicas de extracción. Le preocupa especialmente que todos los socios se sientan integrados y que el club no se convierta en una de esas asociaciones masivas con 2.000 miembros, que, en nuestra opinión, se vuelven difíciles de manejar y de mantener autosuficientes. Otra característica que subrayó, como os comentábamos, fue el uso exclusivo de fertilizantes orgánicos en todos sus cultivos, un detalle que nos sorprendió gratamente. Como sabe que soy juez en algunas competiciones cannábicas de renombre, nos lanzó un reto y nos propuso organizar la cata. La idea nos tomó por sorpresa, pero nos pareció una excelente oportunidad para evaluar la calidad de las flores que ofrecen a sus socios. Nos dio cinco muestras diferentes para probar las cepas más representativas del club. Cepas y resinas Tan pronto como nos acomodamos en la barra, el amable presidente nos mostró la carta completa, que incluía tanto flores como extracciones. En cuanto a las flores, no las contamos todas, pero estimamos que había entre doce y quince variedades, tanto de invernadero como de interior. En lo que respecta a las extracciones, ofrecían unas seis o siete, todas realizadas mediante métodos secos. Todas lucían bastante prometedoras, e incluso tenían static hash, lo que nos lleva a considerar la posibilidad de realizar una cata de sus extracciones en el futuro, ya que deben ser exquisitas. A veces, es preferible tener un número moderado de cepas de alta calidad a tener una gran cantidad que no cumpla con los estándares deseados. Además, constantemente actualizan su menú con las variedades que han ganado premios en competiciones, ya que suelen trabajar con clones élite o con selecciones de semillas de la más alta calidad. Cómo haremos la cata Realizaremos la cata siguiendo los mismos procedimientos que empleamos cuando actuamos como jueces en otras competiciones. En esta ocasión, utilizaremos un vaporizador portátil de gama alta que produce un sabor puro y un vapor denso. Ajustaremos la temperatura a 200 grados Celsius para asegurarnos de vaporizar todos los cannabinoides y terpenos. Para evaluar el aspecto, emplearemos un pequeño microscopio 50X, lo cual es más que suficiente para examinar el estado de los tricomas. Adicionalmente, usaremos un grindernuevo para evitar la mezcla de sabores previos. Lo limpiaremos después de cada uso durante la cata para evitar cualquier tipo de contaminación. Cada cata incluirá exactamente 250 miligramos de flor, asegurando así que siempre vaporizamos la misma cantidad y que nuestras evaluaciones sean más precisas. 56 Vaporizador ajustado a 200 grados Celsius “ “ ESTE CLUB SE CONSIDERA MÁS UNA ASOCIACIÓN CULTURAL QUE UNA MERA AGRUPACIÓN PARA EL CONSUMO La cata 250 miligramos de MK Ultra

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