es importante recalcar que todas estas creencias carecen de base o fundamento científico alguno. Al menos, por ahora no existe evidencia de una relación de causa y efecto entre la luna, y todas estas cuestiones. En lo relativo a las plantas, sucede lo mismo. Existe la creencia popular de que los cambios de fase lunar afectan e influencian el crecimiento y desarrollo de las plantas. Unos alegan, como motivo, el campo gravitacional; otros aducen que como la luminosidad de la luna varía, de ahí se deriva su efecto sobre el crecimiento vegetal… ¿Qué nos dice la evidencia sobre el calendario lunar? Nada. No existe evidencia científica clara que demuestre la influencia de la Luna en el crecimiento de las plantas. Así lo determinó, de hecho, hace un par de años, un equipo del Jardí Botànic de Didáctica de las Ciencias Experimentales de la Facultad de Magisterio de la Universitat de València cuando publicaba, en la revista Agronomy, los resultados de una revisión científica1 realizada para comprobar si los mitos de la Luna y el crecimiento de las plantas tenía alguna base científica consolidada en diversos campos (biología, física y agronomía). Así, si bien atestiguan la existencia de información científica sobre el tema desde la década de los años cuarenta del siglo pasado, tras la revisión no hallaron evidencia clara. El mismo equipo advertía la necesidad de “abordar con objetividad las ideas pseudocientíficas sobre esta materia”2, sorprendentemente abundantes en los alumnos que comenzaban sus estudios universitarios. Además, aprovecharon la ocasión para llamar la atención sobre el modo en que tradiciones populares relacionadas con la influencia de la Luna en el crecimiento de las plantas habían sido incluidas en la denominada agricultura biodinámica, corriente basada en las teorías de Rudolf Steiner, que comparte prácticas con la agricultura ecológica, a la vez que encuentra base en fuerzas y ritmos cósmicos (no solo de la Luna). Es posible que el calendario de cultivo lunar sea una patraña que se circunscribe en la tendencia general de recuperación de añejos esoterismos, como demuestra la nueva cohorte de lectores de horóscopos. O, a lo mejor, no nos han llegado los medios para desentrañar el misterio. ¿Quién sabe? 45 Luna llena (Pexels, CC0, Pexels)
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