Antonia Macías urdiendo una suela (Eugenio Monesma) a tensar el hilo, además de unas marcas que ayudan a dar la medida deseada. El trabajo del cosedor, como su propio nombre indica, es el de coser las suelas. El cosido también se realizaba en el banco de alpargatero. El hilo de coser o “cosedera” se preparaba retorciendo el hilo para reducir el número de hebras; en el documental vemos a Ángel utilizando su propia pierna y ayudándose con su saliva para torsional el hilo y enhebrarlo en la “lezna” (aguja). Con la lezna, Ángel atraviesa todas las vueltas de trenza de la suela: en cada puntada desprende de la aguja el hilo para estirarlo, y una vez hecha la pasada vuelve a enhebrar la aguja. La estaquilla de la mesa actúa como palanca para ayudar a tensar el hilo, y tras varias puntadas quedan todas las vueltas de la trenza juntas y sujetas. Una vez urdida la suela, Manolo retoma el proceso para confeccionar las delanteras y talones de la alpargata. Sobre una plantilla, marca en una pieza de ropa, en este caso de algodón, el contorno de las piezas; una vez marcadas, las corta y dobla, preparándolas para el cosido. En un banco consistente en dos tablas que actúan como una pinza, sujeta la suela y comienza el “remonte”. El remonte consiste en coser a la suela la delantera y el talón. Utiliza hilo de algodón, una aguja de capellán y una hoja de latón (la “repuja” o “tapadilla”) para ayudarse a empujar la aguja y traspasar la compacta suela de cáñamo. Finalmente, realiza la “puntera” o “morrera”, que es el cosido decorativo en la punta y que a su vez sirve de refuerzo, y unos detalles en los laterales que unen a las delanteras con los talones. 51 Banco de alpargatero y sus herramientas (Eugenio Monesma) Alpargatas finalizadas (Eugenio Monesma) “ “ EN EL HASH MARIHUANA & HEMP MUSEUM TENEMOS EXPUESTOS DIFERENTES EJEMPLOS DE CALZADO REALIZADO CON, ENTRE OTROS MATERIALES, EL CÁÑAMO
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