en los ejemplos anteriores, esta vez parece que sí, que las cosas van completamente en serio. Al menos en la nota de prensa existen muchas pistas que permiten obtener esta conclusión. En la misma se pone un plazo temporal, manifestando que “en los próximos meses” existe intención de elaborar un Real Decreto al respecto e informaba de la habilitación de una dirección de correo destinada a la participación ciudadana. Los Reales Decretos son aprobados por el Gobierno sin necesidad de pasar por un proceso legislativo en las Cortes Generales (Congreso de los Diputados y Senado). En teoría, esto puede limitar la participación y el debate parlamentario en la creación de leyes, reduciendo la intervención de los representantes elegidos por el pueblo. Sin embargo, en el caso que nos ocupa, la regulación no parte de cero, sino que se basa en el trabajo realizado en el Parlamento en la legislatura anterior. El anuncio especifica que el Real Decreto estaría basado en las conclusiones de la Comisión de Sanidad y Consumo “Analizar experiencias de regulación del cannabis medicinal”, impulsada por el PNV en el Parlamento. Esta Comisión llevó a la comparecencia en el Parlamento, entre 2021 y 2022, a muchos de los principales expertos en el asunto. No solo desfilaron preventólogosy psiquiatras, sino también farmacólogos, neurólogos, oncólogos, expertos en salud pública... ¡incluso pacientes y activistas! Por una vez parece que se escucharon todas las voces y las conclusiones de esta comisión eran claras. En primer lugar, reconocía que la disponibilidad de medicamentos con principios activos del cannabis era muy limitada e insuficiente para cubrir las necesidades de los pacientes. Señalaba la importancia de disponer de preparados estandarizados de cannabis (es decir, con concentraciones fijas, determinadas y estables). También insistía en la necesidad de establecer procedimientos claros para la prescripción, elaboración y dispensación de estos preparados, asegurando un acceso controlado y seguro para los pacientes. Por si quedaban dudas acerca de la intención del Ministerio, la nota de prensa señalaba que el secretario de Estado de Sanidad ya se había reunido, por un lado, con el Observatorio Europeo del Consumo y Cultivo del Cannabis (OECCC) y, por otro, con representantes nacionales del colegio de médicos, de farmacéuticos y las dieciocho sociedades científicas médicas más importantes del país. Según dice la nota de prensa del Ministerio, todas ellas “aprueban la nueva regulación”. De entrada, causa cierta sorpresa la idea de que psiquiatras, internistas, pediatras, hematólogos, oncólogos, neurólogos y burócratas de los colegios profesionales acaten sin rechistar la inminente regulación del cannabis terapéutico. Salud verde 84 Las sociedades científicas y colegios de médicos apoyan la norma “ “LA MINISTRA DE SANIDAD PROPONE CAMBIOS SENSATOS SOBRE EL CANNABIS TERAPÉUTICO
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