Según las entrevistas realizadas a 10 adultos de 64 años (o más) por dos científicos del Colegio de Graduados y Estudios/Centro de Gerontología de la Universidad de Concordia-Chicago en River Forest (EE.UU.), el cannabis puede ser útil para el tratamiento de enfermedades crónicas. Los investigadores se basaron en una investigación cualitativa en forma de entrevistas semiestructuradas e individuales.
Sus conclusiones sugieren que los adultos mayores están abiertos al cannabis con fines medicinales como alternativa a los productos farmacéuticos, esperanzados con respecto al tratamiento de los síntomas y el dolor, y conscientes y astutos en el manejo de las cuestiones relacionadas con el estigma tanto de sus médicos como de sus familiares y amigos. Además, los adultos mayores describen las frustraciones con la educación, la concienciación y la falta de apoyo con la dosificación.
Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.