Cannabis Magazine 236

106 algún paquete de tabaco que, si no era mentolado, era algo muy similar en el gusto. Y es que el mercado de las drogas, legales incluidas, suele encontrar la forma de esquivar las prohibiciones y satisfacer la demanda. Actualmente, en Estados Unidos, este tema está al rojo vivo, ya que se han utilizado argumentos raciales a favor y en contra de esta medida, porque es la comunidad negra la mayor consumidora de tabaco mentolado, con un 85 % de fumadores que usan este producto. De esta forma, se ha señalado como un ataque contra dicha minoría y, al mismo tiempo, como un acto de cuidado de la salud hacia el mismo grupo. Algunos estados prohibieron la venta adelantándose, y la FDA poco después anunciaba que levantaría la prohibición para, finalmente (seguramente atendiendo a los distintos momentos electorales), inclinarse de nuevo por su prohibición nacional hace unas pocas semanas. En la propuesta prohibicionista del Reino Unido sobre el tabaco, se tiene muy en cuenta el no hacerlo afectando a la opinión pública, y esta se inclina mayoritariamente porque “se tendría que prohibir el tabaco... en algún momento del futuro”. Es decir, prohibición sí... pero que no me pille a mí. Así que la propuesta (que otros países, como Dinamarca y Malasia, también se están planteando implementar) es una copia del modelo aprobado en Nueva Zelanda a finales del año 2022 e impulsado por el gobierno laborista (joder, ¡cómo viene la izquierda!), y que prohíbe la venta de tabaco a todas las personas nacidas a partir del año 2009, con sanciones de hasta 90.000 euros. ¿Por qué desde ese año? Básicamente porque así los legisladores no tendrán que pagar las consecuencias políticas de haber privado a nadie del derecho a elegir qué consume, ya que cuando se aprobó la ley, los afectados tenían 13 años o menos, por lo que el castigo electoral solo sería perceptible cuando los afectados cumplieran 18 años y pudieran ejercer el derecho al voto. Eso es dentro de unos cuatro o cinco años y de forma progresiva, según las nuevas generaciones van llegando a la edad legal. Este hecho convertirá a Nueva Zelanda, y al Reino Unido si aprueba la medida, en el tercer y cuarto país del mundo “sin tabaco”, tras Bután, que inició la prohibición (de venta y consumo para toda la población) en el año 2004, pero no la implementó totalmente hasta 2010, y Turkmenistán, que aspira a prohibirlo de igual forma en el año 2025. Curiosamente, estos son dos países con poco aprecio por la libertad del individuo, gobernados con distintos modelos de autocracia (joder, ¡cómo vienen los dictadores!) que oscilan entre una seudomonarquía constitucional en Bután a un sultanato absolutista hereditario con aderezo de falsa democracia (eh, ¡que con Franco también se votaba!) en Turkmenistán. Por dar una pincelada sobre estas exóticas tierras de avanzadas políticas en salud baste decir que en Bután la televisión e internet estaban prohibidos hasta el año 1999, o que la ONU considera a Turkmenistán como uno de los países más represivos y dictatoriales del planeta, y Human Rights Watch lo define como un país aislado y represor, con nula libertad política y religiosa, absoluto control del acceso a la información, y la bella práctica rutinaria de hacer desaparecer ciudadanos en prisiones sin control judicial real. Todo ello de la mano del dictador Berdimuhamedow, quien disfruta junto con sus aliados de un poder ilimitado y un control total de la vida pública. Eso sí, este alegre tirano regala frecuentemente a su pueblo canciones que interpreta en televisión junto con su hijo, habiendo logrado en 2015 romper el récord del mundo al emitir una canción (con la letra escrita por el gerifalte) con un coro de 4.166 ciudadanos. “ “LA OMS DICE QUE LOS VAPEADORES NO SON UN MECANISMO DE REDUCCIÓN DE RIESGOS, SINOUNA TRAMPA PARA RECLUTAR NIÑOS DESDE LOS DIEZ AÑOS Y ENGANCHARLOS CON SUS COLORES Y SABORES Cartel señalizador de la prohibición de consumo de tabaco u otros productos mediante combustión Advertencias obligatorias con imágenes en los paquetes de cigarrillos para disuadir de su consumo Reportaje

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