contenido de agua, pH, aireación, concentración de ion calcio (Ca2+) y la proporción de otros elementos químicos como nitrógeno, potasio, fósforo, hierro… pero también depende de factores internos de la planta, como su pared celular, tasa fotosintética, transpiración, respiración, etc. Tanto la absorción de Ca como su translocación hacia los distintos órganos del vegetal son procesos pasivos. El Ca en el xilema (tejido vegetal lignificado que transporta agua y nutrientes desde la raíz hasta las hojas) se transporta hacia arriba con la corriente de transpiración y aumenta a medida que lo hace la tasa de transpiración. Pero, por el contrario, si disminuye está tasa, también lo hace la distribución del Ca, sobre todo hacia los órganos de reserva, como los frutos o los brotes apicales. El calcio es transportado casi exclusivamente por el xilema en forma iónica (Ca2+) o formando complejos con ácidos, como el málico o el cítrico, siendo la concentración de estos en el floema muy baja y su traslocación muy lenta. Así, es un elemento poco móvil en los vegetales y tiende a acumularse en los órganos más viejos. Pero los órganos y tejidos metabólicamente más activos como las flores, hojas en desarrollo, frutos o meristemos apicales necesitan mayores aportes de Ca, por lo que su carencia se visualiza primero en estas partes jóvenes. Los síntomas aparentes de las deficiencias son los siguientes: ● Las hojas más jóvenes de la planta son las primeras en ser visiblemente afectadas. Los síntomas de la carencia de calcio son reconocibles porque aparecen manchas amarillas y marrones con un estrecho contorno marrón bien definido que pueden parecer quemaduras. Consecuentemente, las nuevas hojas se enrollan, se retuercen y mueren. ● Se retarda el desarrollo de la parte alta de la planta. El crecimiento se ralentiza. ● El sistema radicular se ve afectado, con lo que la absorción de nutrientes se reduce. ● El crecimiento de las flores se ve gravemente afectado, en especial durante el punto máximo de floración. ● La producción (cosecha) se ve seriamente reducida. ● Al final, las plantas pierden vitalidad y se marchitan. Existen diferencias significativas en cuanto a los requerimientos de calcio entre las distintas especies vegetales. Así pues, especies como las leguminosas, remolacha azucarera o la zanahoria se les denomina plantas calcícolas porque requieren grandes cantidades de calcio en el suelo. Mientras que especies como la sandía o el altramuz requieren que la presencia del Ca en el suelo sea más bien escasa, denominándose plantas acidófilas. Pero la mayoría de las plantas cultivadas se encuentran en un punto intermedio, donde el complejo de cambio catiónico del suelo esté saturado con una proporción adecuada. Un aspecto especialmente importante en el cultivo en medios sin suelo es esta capacidad de intercambio catiónico, responsable de algunos de los dolores de cabeza más significativos que los cultivadores encuentran. Si la capacidad de intercambio catiónico del calcio no funciona correctamente debido a un exceso de otro nutriente, el medio puede retener los iones de calcio y no podrán ser absorbidos y utilizados por la planta. 40 DEFICIENCIA EN LAS PLANTAS HOJAS NUEVAS ATROFIADAS Y DEFORMADAS HOJAS SUPERIORES VERDE CLARO AMARILLAS Y ARRUGADAS HOJAS NUEVAS AMARILLAS O BLANCAS DECOLORACIÓN AMARILLA Y BORDES DE LAS HOJAS SECOS MANCHAS AMARILLAS AGUJEROS ALARGADOS ENTRE LAS VENAS LAS HOJAS INFERIORES SE VUELVEN AMARILLAS DESDE EL EXTERIOR LAS HOJAS SON MÁS OSCURAS DE LO HABITUAL MANCHAS BLANCAS CRECIMIENTO ATROFIADO MUERTE DE LA PLANTA Guía CALCIO NITRÓGENO FÓSFORO DIÓXIDO DE CARBONO HIERRO POTASIO MANGANESO MAGNESIO Fertilización “ “LAS CARENCIAS SON MÁS FRECUENTES EN CULTIVOS HIDROPÓNICOS O EN CULTIVOS CON SUSTRATOS MUY ÁCIDOS, PERO PUEDEN APARECER OCASIONALMENTE EN COSECHAS DE INTERIOR O EXTERIOR [email protected] (depositphotos)
RkJQdWJsaXNoZXIy NTU4MzA1