El artículo, publicado en una revista médica, señala que podría funcionar como complemento para la quimioterapia en base al caso de una paciente de 49 años. “El cannabis brinda ayuda cuando sientes que no puedes continuar”, dijo la mujer que siguió esta terapia.

n artículo científico publicado en la revista Drug Science analizó la posibilidad del “efecto complementario terapéutico” tanto de psicodélicos como de aceite de cannabis en el tratamiento del cáncer de mama en su etapa de metástasis.

El planteo se basa en el caso de una mujer de 49 años cuya identidad es reservada, y que se cree que vive en Gran Bretaña. Ella fue diagnosticada con cáncer de mama en etapa 4 en agosto de 2018, y los estudios revelaron que esta enfermedad se había extendido a sus huesos, hígado y ganglios linfáticos.

En su tratamiento, comenzó con quimioterapia y se le administraron medicamentos de anticuerpos monoclonales. Por elección propia, empezó a tomar aceite de cannabis todos los días y microdosis “intermitentes” de hongos alucinógenos.

En enero de 2019, los estudios mostraron que su cáncer había desaparecido por completo y no había signos de enfermedad. Se detuvo la quimioterapia, pero continuó tomando uno de los medicamentos de anticuerpos monoclonales, y también con el consumo de cannabis y psicodélicos.

En septiembre de ese mismo año, su cáncer aún estaba en remisión, por lo que redujo a la mitad su consumo de cannabis y dejó de tomar hongos. 18 meses después, señalan los expertos del Imperial College London en la revista Drug Science, la enfermedad regresó. 

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Ante esto, con supervisión médica, volvió a sus dosis habituales, retomó la quimioterapia y comenzó la radioterapia: su cáncer volvió a estabilizarse y a retroceder. 

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Aceite de cannabis.

El rol del cannabis y los psicodélicos como complemento del tratamiento contra el cáncer 

Rayyan Zafar y sus colegas firmantes de la investigación explican en el artículo que existe “la posibilidad del efecto complementario terapéutico tanto de los psicodélicos como de los cannabinoides en el tratamiento del cáncer de mama metastásico”, es decir, que pueden ayudar a potenciar el tratamiento tradicional contra el cáncer.

“Esto plantea la posibilidad de que la retirada de las terapias con cannabinoides y psicodélicos pueda haber contribuido al regreso del cáncer”, manifestaron sobre el caso de esta paciente de 49 años.

Si bien desconocen las particularidades sobre cómo podrían haber funcionado las drogas psicoactivas, investigaciones anteriores han demostrado que los hongos mágicos pueden privar a los tumores de las proteínas que necesitan para crecer. Cancer Research UK dice que la investigación muestra en algunos estudios indicios de que los cannabinoides funcionan de manera similar.

“El cannabis cura y da vida”, dijo la paciente

La paciente dio su testimonio en el artículo publicado y expresó: “El cannabis brinda esperanza. Brinda ayuda cuando sientes que no puedes continuar. Pude comer. Pude dormir. Las náuseas eran casi inexistentes. Podía funcionar. Podía trabajar Ya no era esclava de mi enfermedad”.

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“Imagina un mundo que acepte el cannabis como una verdadera planta medicinal que cura a los que padecen enfermedades. Esa es la esperanza que ofrece el cannabis. Cura. Restaura. Da vida. Y el acceso NUNCA debe estar en duda”, manifestó la mujer sobre su experiencia.

El cáncer de mama es la segunda causa más común de muerte por cáncer en mujeres en el Reino Unido y Estados Unidos y es el cáncer más diagnosticado, con 2,3 millones de casos nuevos cada año.

Los aceites que solo contienen CBD son legales en el Reino Unido y se han convertido en una industria en auge de £ 690 millones al año.

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Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.