Los concejales de Berlín han votado para lanzar el primer café de cannabis en el país y en su distrito, aunque han informado de algunos obstáculos.
La alcaldesa del Distrito, Monika Herrmann, dice que la “política de prohibición” de las últimas décadas ha fracasado: “Ahora tenemos que pensar en soluciones fuera de lo común.”
La legislación alemana prohíbe la venta pública de los narcóticos, pero las excepciones son posibles “con fines científicos o de otro tipo en el interés público.”
El distrito de Berlín parece querer confiar en esta cláusula cuando se solicite el permiso de las autoridades federales. Pero el Süddeutsche Zeitung advierte que otros asuntos legales tendrán que ser aclarados, por ejemplo, quién va a regentar el coffeeshop y cómo debe proveerse de cannabis.