Una de las mejores variedades del espectro cannábico a estudio. Cada día aparecen nuevos bancos de semillas y en consecuencia son muchas las nuevas variedades que surgen. Sin embargo, la gran mayoría son híbridos o mezclas procedentes de los “clásicos” que aunque aportan mucho a este universo cannábico no dejan de ser meras copias o réplicas de las ya existentes.
En este número no puedo dejar de hablar de una variedad que he cultivado desde hace ya años y que jamás me ha decepcionado: la Nothern Lights, toda una joya dentro del cannabis narcótico.
En efecto esta planta es ya todo un clásico y son muchos los que la han cultivado. Como ya estamos en época de exterior (yo no recomendaría plantar antes de primeros de junio) vamos a hacer un repaso de las claves para conseguir que esta maravilla nos entregue todo su potencial, que es enorme. Desde ya mismo digo que no es una planta difícil pero tiene ciertas peculiaridades que conviene saber si no queremos llevarnos alguna sorpresa desagradable. En realidad la única sorpresa que podemos encontrar es su baja producción si no hacemos las cosas “como Dios manda”. La NL es una planta pequeña, de no mucha productividad. Sin embargo, podemos incrementarla notablemente con una serie de actuaciones que pasamos a enumerar. Hecho esto podremos conseguir una buena cantidad de marihuana y, en cualquier caso, su calidad fuera de serie hace que con menos consigamos más; muy de agradecer.
NL INTERIOR
Personalmente siempre he cultivado esta planta desde semilla y además feminizada. La he cultivado de diferentes bancos ya que son muchos los que la incorporan a su catálogo. No es de extrañar dada su calidad. Las NL feminizadas pueden resultar algo canijas si no las abonamos adecuadamente y si no les damos un cierto periodo de vegetativo. Pero vayamos desde el principio.
Efectivamente tras germinar las semillas las puse debajo de unas lámparas Agrolite de 400 vatios para que crecieran bien y mucho. Normalmente se ponen bajo fluorescentes hasta llegar a la floración pero como ya he dicho las NL tienen cierta tendencia a salir pequeñas con lo cual es mucho mejor y recomendable darles unas 3 semanas de 18/6 o 20/4 durante tanto tiempo como sea posible. Un mínimo de 3 semanas pero si le damos 4 o 5 aún mejor. Por supuesto una lámpara de 400 vatios las hará crecer mucho más que unos simples fluorescentes.
Las macetas deben ser grandes; de al menos 7 litros. Pero si las ponemos en macetas de 11 litros todavía mucho mejor. Las raíces del cannabis son su punto más flojo ya que son perezosas y débiles. Pero en la NL esta característica se atenúa y mucho. Esta variedad goza de las mejores raíces que yo haya visto en mi vida. De hecho son tan fuertes que crecen bien en cualquier sitio pero…¡Cuánto mejor sea el sitio mejor la producción! Como ya he dicho os aconsejo macetas grandes y un buen periodo de vegetativo.
Por supuesto durante este periodo debemos abonar a conciencia y bien. No nos olvidemos de que la única manera de evitar el enanismo es combatiéndolo con altas dosis de nitrógeno (N). Y para conseguir esto podemos abonar de varias maneras pero mi consejo personal es añadir una buena cantidad de humus de lombriz al substrato. Cuando digo “buena cantidad” me refiero a llegar hasta un 25% del volumen total de substrato. O sea, que si tenemos 10 litros de buen substrato deberemos añadir 2,5 litros de humus. El humus de lombriz roja contiene mucho N y además mejora la estructura del substrato haciéndolo más esponjoso y favoreciendo el intercambio catiónico. El intercambio catiónico consiste en la capacidad de un substrato para absorber y posteriormente adsorber los nutrientes. Mejora notablemente la ab y la adsorción.
Hago especial hincapié en este punto ya que la única manera de conseguir tamaños grandes en las plantas es con cultivo hidropónico. ¿Por qué? Es muy sencillo. Con la hidroponía usamos substratos inertes, sin alimento alguno para las plantas. El alimento se lo aportamos nosotros mediante el abonado. Pero lo realmente importante y decisivo del cultivo hidropónico es que el substrato utilizado es muy poroso y además se seca con mucha rapidez lo cual nos obliga a regar con mucha frecuencia. Esto, que puede parecer un inconveniente, no lo es en absoluto sino más bien todo lo contrario. Como regamos con tanta frecuencia el substrato nunca se satura de sales metálicas ya que el agua del riego arrastra éstas cada vez que regamos. Por lo tanto podemos añadir abono con mucha más frecuencia y nunca “sobrefertilizaremos” las plantas.
Pero entonces, ¿estoy aconsejando el hidropónico para las NL? Sí y no. Me explico. Yo personalmente las he cultivado en orgánico, con una muy buena tierra, bien de Atami bien de BAC organics. Sin embargo, aunque las cultivemos orgánicamente, podemos y debemos utilizar las ventajas de la hidroponía. Me explico mejor. Lo aconsejable es usar una buena tierra a la que añadiremos la cantidad de humus de lombriz ya comentada y además una gran cantidad de “aireantes”, perdonadme el palabro, del tipo lava volcánica, perlita, arlita, akadama etc. Personalmente os aconsejo la lava volcánica de tamaño grande ya que contiene muchos poros que permitirán una mayor aireación del substrato y en consecuencia una mayor rapidez de secado entre riego y riego. Si os decantáis por esta opción os aconsejo que antes de mezclar la lava volcánica las lavéis a conciencia. Yo la pongo en un barreño y le doy agua a presión. ¿Por qué? Pues sencillamente porque la lava volcánica viene llena de polvillo que obstruye los poros, que es lo que más nos interesa de este producto. Por lo tanto debéis lavarla algo antes de mezclarla con el substrato.
Si usáis un buen substrato y le añadís humus de lombriz y lava volcánica (cuanta más mejor) conseguiréis el medio ideal para el cultivo de cannabis en general y de las NL en particular. De esta manera seguimos cultivando orgánicamente pero utilizando las ventajas de la hidroponía.
El abonado es esencial con esta variedad ya que es comilona, no en exceso, pero comilona. Por supuesto con abonos orgánicos de gran calidad. Personalmente las he abonado tanto con Biobizz como con BAC organics. Ambas marcas son extraordinarias aunque en realidad existen más marcas también fantásticas siempre que sean orgánicas. Es una tontería abonar con química un producto que va a terminar dentro de tu organismo. Y no sólo por cuestiones de salud sino también por cuestiones de eficacia. Los abonos orgánicos mejoran la estructura del substrato mientras que los químicos lo degradan y deterioran paulatinamente. No penséis que os viene bien ahorraros unos euros con la química porque al final lo pagarás en concepto de calidad y cantidad.
Durante estas 3 o 4 semanas de vegetativo abonad bien con especial crecimiento, alto en N y más bajo en P y K. Por supuesto ajustaos a criterios de electro conductividad. Aquellos que no tengáis un medidor de EC deberíais plantearos comprar uno lo antes posible. No son especialmente caros y nos permiten ajustarnos correctamente en nuestro protocolo de abonado.
Durante este periodo y dado que las NL estaban todavía pequeñas nunca pasé de 1,00 milisiemens. Es más que suficiente y sobrepasar esta cifra no es nada recomendable ya que tan sólo conseguiríamos “empachar”, si me permitís este símil alimentario, a las niñas. La planta, siendo todavía muy pequeña, no podrá con tanta “comida” y en consecuencia la dejará intacta, encima de la mesa, siguiendo con la comparativa de alimentación humana. Y dejar la comida encima de la mesa significa que los restos del abono, las sales metálicas, se quedarán adheridas a las raíces. Esto es la mayor putada que le puedes hacer a tu planta ya que no sólo no se las come sino que además le impides que siga comiendo en el futuro. Piensa que la has empachado y tendrás que curarla antes de seguir alimentándola. Si os sucede esto BAC tiene un producto llamado Final Solution, que no es más que un complejo enzimático muy eficaz para lavar las raíces de cualquier resto de sales metálicas. E incluso aunque no hayáis sobrefertilizado deberíais usarlo. Otras marcas también tienen enzimas y que funcionan de maravilla.
Una vez más tenemos que hablar del agua cuando se trata de la NL. El agua debería ser idealmente buena. Si tan sólo podemos llegar a una EC de 1,00 milisiemens en vegetativo es fundamental que el agua, sin añadirle abono alguno, no pase de 0,4 milsiemens. De esta manera podremos añadir abono hasta llegar a 0,6 milisiemens. O sea, que 0,4 del agua y 0,6 del abonado nos dan un total de 1,00 milisiemens. Por lo tanto cuanto menos pura sea el agua menos abono podremos poner para no sobrepasar la cifra de 1,00 Ms. Un poco espeso de explicar pero fundamental si queremos conseguir buenos resultados con esta estupenda variedad.
(Continuará)