Quizá hayáis escuchado alguna vez que, en el caso de pasarse de la raya al fumar marihuana y sufrir lo que comúnmente conocemos como “un amarillo” o “blancazo”, lo recomendable es comer algún dulce.

Sin embargo, algunos de vosotros nos habéis preguntado si esto es real; si, en su defecto, es mejor comer algo salado o, en general, cuál es el protocolo que recomiendan los médicos en estos casos. Empezamos por aclarar que la mejor forma de proceder es no consumir droga, obviamente.

Para quien no sepa a lo que nos referimos cuando hablamos de estos términos, un amarillo es una es una intoxicación moderada por efecto del cannabis en tu cuerpo y tu cerebro. Los síntomas difieren en función de la persona y su tolerancia a la droga, de la cantidad consumida y de la pureza de la sustancia. Estos van desde sudores fríos y taquicardias hasta pérdida parcial de visión y audición, desorientación y paranoia y, cuando estos comienzan a disminuir, hambre.

No hay un tratamiento específico, lo mejor es beber mucha agua y tomar ‘medidas de confort’ que te hagan encontrarte mejor, como comer algo dulce o salir a que te dé el aire“, explican a Maldita Ciencia Guido Rodríguez de Lema y Juan Sánchez Verde, médicos y autores de Yo Doctor. “En caso de agitación, taquicardias o vómitos muy locos, lo mejor es buscar asistencia médica“, añaden.

Jaime Ribas Escalera, enfermero de urgencias, coincide: “En un caso leve, lo recomendable es tumbarse en un lugar con aire fresco hasta que el efecto de la droga disminuya”. Añade que hay que tener en cuenta el peso del paciente, la cantidad y la concentración de cannabis que haya inhalado.

Te puede Interesar
El cannabis como fuente de placer y otros pecados

“Que yo sepa, comer algo dulce no tiene una repercusión directa en la intoxicación por marihuana“, explica Rosa Piñas, enfermera de urgencias, a Maldita Ciencia. “La marihuana no tiene ningún antagonista, es decir, si alguien la toma y le sienta mal, generalmente se tiene que aguantar y esperar a que se le pase”, continúa.

Según Piñas, en estos casos solo se realiza un tratamiento sintomático. “Si el paciente viene en muy malas condiciones, le ponemos suero para obligarle a orinar. Cuanto más orine, más se limpia el cuerpo, así que forzamos la diuresis para hacer que vaya desapareciendo“, indica Piñas. “Es cierto que, igual que hay gente a la que fumar en exceso les puede marear o hacer que se rían, a otros les da hambre… pueden comer lo que quieran, pero el dulce no les va a hacer mejorar directamente“.

“Fumar demasiada marihuana puede provocar que una persona tenga unos efectos u otros. ¿Que viene hipotenso? Se tratan temas de líquidos. ¿Que viene alterado? Se utiliza algún método tranquilizante”, explica a Maldita Ciencia Elisa Lopera, jefa de urgencias del Área Sanitaria Norte de Córdoba. “Se tratan los síntomas que presente la persona a raíz del consumo más que la patología en sí como algo que sea siempre igual“, aclara.

Según Ribas, hay excepciones en los que la situación puede complicarse y llegar a un fracaso pulmonar. “La esencia de la recuperación sería tener a esa persona en observación, si está en urgencias se le pondría oxígeno, para que respirase bien y garantizar que esto no ocurra“, comenta. “Lo normal es que no lleguen a acudir al hospital, pero sí que se han visto casos graves”.

Te puede Interesar
¿Qué es exactamente un 'amarillo' por el consumo de cannabis y qué debes hacer si te ocurre?

“Lo más importante es aprender que, si algo te sienta mal, no debes hacerlo de nuevo y recordar que, al fin y al cabo, estamos hablando de consumo de drogas”, concluye Piñas. “No hay cosa que más rabia me dé que alguien que venga con una taquicardia porque ha fumado un porro me venga a decir que le ponga ‘otra droga’ para que el corazón se calme. Tiene que ser responsable de lo que ha hecho y, en este caso, esperar a que los efectos se reduzcan“.

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.