“Ya tenemos dos likes”. Lora Fountain acaba de publicar una foto en su cuenta de Instagram donde sale su marido dibujando en el patio azul del Hash Marihuana & Hemp Museum de Barcelona. Su pareja es el icónico historietista Gilbert Shelton. Junto con Robert Crumb y Vaughn Bodé es uno de los artistas más importantes del cómic underground. Es el creador de los Fabulous Furry Freak Brothers y Fat Freddy’s Cat.

Texto: Ferenz Jacobs | Fotos: Hash Marihuana & Hemp Museum Barcelona/Ámsterdam

A principios de julio, Gilbert Shelton (77) y su esposa Lora Fountain estuvieron en Badalona para asistir a la undécima edición del Cryptshow (cryptshow.com). El festival de cine fantástico y de terror ha otorgado al dibujante estadounidense el premio honorifico de este año. Aprovechamos su estancia para invitarles a un desayuno en nuestro museo en Barcelona, un par de horas antes que tomaran el tren de alta velocidad de vuelta a París.

¿Les apetece un café con un croissant?

Gilbert (G): “No, gracias.”

Lora (L): “Yo un vaso de agua fría, por favor.”

También tenemos té de cáñamo.

G: “Ah, me acuerdo que una vez hicimos un paseo en coche con unos amigos por el campo francés. Pasábamos campos de trigo y otros cultivos hasta que uno de nuestros amigos gritó: ‘¡Para el coche!’… Había visto un campo de marihuana. Resultó ser un campo de cáñamo en floración. Cortamos algunas flores y liamos un porro, pero no nos hizo ningún efecto. Luego metimos un cogollo entero en agua caliente para hacer té y creo que sentí algo.”

¿El creador de Fat Freddy’s Cat tiene algún gato?

G: “Sí, tenemos dos. Uno se llama Zippy, como Zippy the Pinhead (un personaje de cómic creado por Bill Griffith en 1971) porque está igual de loco. Y a la otra la llamamos Diane Kitten por la actriz Diane Keaton. Aunque suelo llamarla Diane the Huntress (la cazadora).”

L: “Pero ellos no viven con nosotros, es al revés. Nosotros vivimos con ellos. Es tal cual dicen: los perros tienen dueños y los gatos sirvientes. ¿Conocéis a Simon’s Cat? Es una serie animada de un travieso gato doméstico que se puede ver en YouTube y Facebook. Cada episodio termina con el gato con su patita moviéndose hacia su boca indicando que tiene hambre. Es muy divertido.

Pero el mejor gato es Fat Freddy’s Cat.

L (riéndose): “Por supuesto.”

Y una de las mejores historias del gato de Fat Freddy es La Guerra de las Cucarachas (1987).

L: “Cuando conocí a Gilbert, vivía en Los Ángeles en un apartamento a unos cuatrocientos metros de la playa, en Venice Beach. Y su cocina era igual que en sus dibujos de La Guerra de las Cucarachas.”

G: “Pero eran cucarachas pequeñas. Las cucarachas de mi estado natal Texas son más grandes y vuelan.”

L: “Sí, terrible.”

G: “¿Conocéis la canción mexicana La cucaracha de la época del revolucionario Pancho Villa? (Empieza a cantar) La cucaracha, la cucaracha, ya no puede caminar; porque no tiene, porque le falta, marihuana que fumar.”

Te puede Interesar
Weed of Wonder
Cincuenta años frikis

Los Fabulous Furry Freak Brothers aparecieron por primera vez en el periódico underground The Rag en 1967. Los tres personajes de esta historieta, Freewheelin’ Franklin Freek, Phineas Phreak y Fat Freddy, personifican los clichés sobre los fumadores de cannabis. Son perezosos y gandules. Cuando tienen dinero se lo gastan todo en hierba y comida. Son idealistas, tienen poco respeto por la autoridad y se desternillan con chistes malos. Los tres hermanos fumetas, publicados en dieciséis idiomas en un total de cuarenta millones de copias, pasaron de ser personajes underground a figuras de culto cannábico.

Para celebrar los cincuenta años de su creación, Gilbert Shelton ha hecho un cómic especial llamado Fifty Freakin’ Years of the Fabulous Furry Freak Brothers. Entre otras historias, Phineas se convierte en un terrorista suicida, Franklin obtiene su pistola y Fat Freddy se vuelve religioso. Próximamente, el cómic traducido al castellano será publicado por Ediciones La Cúpula en Barcelona.

¿Cuándo fue la primera vez que fumó marihuana?

G: “Fue en el año 1959. Estaba de viaje en México, en la ciudad de Torreón. Y luego probé más en Acapulco.”

L: “Antes de la Guerra de Vietnam la mayoría de la marihuana llegaba a los Estados Unidos desde México.”

G: “Y en los años setenta empezamos a tener Thai, cuando los soldados volvieron de Vietnam con marihuana tailandesa.”

L: “Era muy fuerte.”

¿Sigue fumando?

G: “Sí, he fumado antes de venir al museo. Por eso ando un poco colocado. Es difícil encontrar marihuana en Francia. Es más fácil encontrar hachís.”

L: “Tampoco podemos plantar ni cultivar nuestras propias plantas. Tal vez con un presidente más joven cambien las cosas en Francia, pero no estoy segura. Creo que Emmanuel Macron lo habrá probado. Hoy en día es difícil llegar a los cuarenta sin haber probado el cannabis por lo menos una vez.”

G: “¿Sabes?, es mucho más agradable estar con personas que han fumado un poco de marihuana que con gente que está borracha.”

¿Cómo está el tema del cannabis en su ciudad de residencia?

L: “Vivimos en el XI Distrito de París, muy cerca del Museé du Fumeur, un pequeño museo dedicado a la costumbre ancestral de fumar.”

G: “Pero es muy pequeño. Desgraciadamente, Francia cuenta con una de las legislaciones más estrictas de la Unión Europea en lo que se refiere al cannabis. Creo que incluso está prohibido mostrar hojas de cannabis en camisetas.”

¿Qué le parece la legalización de marihuana en varios estados de Estados Unidos?

G: “Bueno, de momento, Estados Unidos mantiene al cannabis en la misma clase de drogas que la heroína. Y aunque es legal vender cannabis con fines medicinales, se impide a los dispensarios de marihuana acceder a los bancos, por lo que sólo pueden trabajar con dinero en metálico. Ahora los dispensarios tienen montañas de efectivo y no saben qué hacer con él. ¡Menudo problema!”

¿Ha estado en la capital cannábica de los Países Bajos?

G: “Hace años fui juez en una copa cannábica en Ámsterdam. Cuando llegué, nos dieron treinta muestras para fumar durante cinco días. Seis por día.”

L: “Volvió de Ámsterdam y durmió durante tres días. ¿Pero qué pasó en ese restaurante?”

G: “El último día de la copa aún tenía una muestra que fumar. Estábamos en un restaurante elegante y pregunté al camarero si le importaba que fumara marihuana. Y el camarero gritó: ‘¿A todo el mundo le parece bien si este hombre fuma marihuana?’”

L: “Después de eso, tenía que fumar sí o sí. Me sorprende que, teniendo en cuenta el estado en que estabas cuando volviste, aún te acuerdes de ese viaje. ¿Cómo se llamaba el coffeeshop con los dibujos grandes de los Fabulous Furry Freak Brothers en la fachada?”

G: “No me acuerdo.”

L: “Creo que se llamaba The Other Place.”

G: “No tenía ni idea que había un coffeeshop con mis dibujos. Los dueños eran los Hells Angels. Cuando le dije que eran mis dibujos, el dependiente llamó a su jefe y este apareció con una docena de Hells Angels holandeses. Así que no me atreví pedir los derechos de autor.”

L: “Podrían haberte dado marihuana gratis.”

Hay muchos rumores sobre una película de los Fabulous Furry Freak Brothers, incluso se puede ver un tráiler en YouTube.

G: “Hubo aproximadamente seis proyectos para hacer una película con los Fabulous Furry Freak Brothers, pero ninguno se hizo realidad. El último proyecto fue del director inglés Dave Borthwick. Necesitaban cinco millones de libras para rodar la película que se llamaba Grass Roots, pero no consiguieron suficiente cantidad de dinero. El proyecto de Borthwick fue una animación con plastilina. Una idea que me gustó mucho. Una pena que no pudiera ser.”1

¿Tal vez Disney está interesado?

G (riéndose): “No, no me gustan las películas de Disney. El primer proyecto fue con Universal Studios. Compraron los derechos de autor para un periodo de seis años, pero no hicieron nada y los derechos volvieron a mí. Me dijeron que en Hollywood sólo se realiza uno de cada veinte proyectos. Pero es mejor así. Al menos no hicieron una película como El gato Fritz (1972), donde Robert Crumb tuvo muchos desacuerdos con los cineastas. Además, puedo vender los derechos de nuevo.”

Para terminar el desayuno, le damos una hoja de papel en blanco y Gilbert Shelton, con una gran sonrisa, empieza a dibujar las tres cabezas de Freewheelin’ Franklin Freek, Phineas Phreak y Fat Freddy. Cada uno con un porro en la boca. Este detalle no podía faltar.

www.hashmuseum.com

 

REFERENCIAS

1 En 1973, los Fabulous Furry Freak Brothers llegaron a la gran pantalla, pero en formato pornográfico sin la autorización de su creador Gilbert Shelton. La película se llama Up in Flames (En llamas) y gira alrededor de los hermanos Frank, Vinnie y Fat Freddie que no tienen dinero para pagar el alquiler y para hacerlo se encuentran en cómicas situaciones sexuales.

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.