La industria israelí de cannabis tiene profundas raíces en el mercado norteamericano. Estados Unidos y muchas compañías estadounidenses buscan en el extranjero con principal mirada sobre su socio comercial de confianza, Israel, invertir en el mercado de la marihuana.

“El mercado de la marihuana se dividirá: pastillas para la medicina, articulaciones para el placer”, explicó Ascher. El empresario, que tiene un título médico con especialización en cardiología y un doctorado en ingeniería eléctrica, ambos del Technion-Israel Institute of Technology de Haifa, dividió su vida entre Israel y los Estados Unidos durante muchos años. Su negocio, Therapix Biosciences.

Hace tres meses, recaudó $ 12 millones en la bolsa Nasdaq. Therapix mejoró el tetrahidrocannabinol (THC) con un compuesto químico y el medicamento se utiliza ahora con tratamientos para el síndrome de Alzheimer y Tourette.

La investigación médica y farmacéutica se centrarán cada vez más en la marihuana, según predice Ascher Shmulewitz.

“Esa es la razón principal por la que Israel es un pionero en este campo, como lo fue desde los años sesenta. La investigación médica sobre el cannabis comenzó aquí, aunque ahora otras naciones están ingresando”.

En 1964, el Prof. Raphael Mechoulam, del Instituto Weizmann de Ciencias, fue el primero en aislar con éxito el compuesto THC el elemento psicoactivo de la planta. A los 86 y todavía activo en el estudio del cannabis, con su propio laboratorio de investigación en la Universidad Hebrea de Jerusalén, Mechoulam pronostica un siglo de avances con numerosos efectos de la planta aún por descubrir. De los hasta 400 compuestos naturales claves en la planta, sólo 66 fueron identificados.

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