La legalización del cannabis es siempre tema de controversia, pero lejos de cualquier apología lo cierto es que la planta del cáñamo sirve para múltiples aplicaciones (alrededor de 25.000 productos) y su industria estimada en 500 millones de dólares afecta a sectores tan diversos como el sector alimenticio, farmacéutica o textil.
Cabe señalar que el cannabis indica sativa y cannabis sativa sativa aunque pertenecer a la misma familia de plantas, en cambio, difirieren en sus cualidades. Este último caso, cáñamo industrial contiene aproximadamente 0,3 % de THC ( Tetrahydrocannabinoids ) , tan solo una fracción de los ingredientes narcóticos que se encuentran en la marihuana .
Tal es el grado de aceptación que el Congreso de los Estados Unidos aprobó recientemente un proyecto de ley agrícola que autoriza para fines de investigación los estudios controlados de cáñamo industrial, lo que sin duda se aleja de la habitual estigmatización de esta planta.
Previo a este nuevo proyecto ya el pasado año también se adoptó la ley ‘Industrial Hemp Farming Act’ que excluía al cáñamo industrial de la definición original de “marihuana”. No en vano alrededor del mundo países como China, Alemania, Holanda, Australia o Canadá la industria del cáñamo crece a un ritmo vertiginoso y se prevé que su producción casi se duplique en el 2015.
Siendo además una alternativa ecológica, el cáñamo por su fortaleza y durabilidad reduce al mínimo el uso de pesticidas. Otra de las ventajas es que el papel orgánico en base al cáñamo se puede reciclar dos veces más que el fabricado con pulpa de pino. Sin olvidar tampoco su utilidad en la industria de la moda al igual que el posible rendimiento como fuente de biomasa.
Pero quizá el campo más prometedor se encamina a la medicina. No es únicamente paliativo del dolor en enfermos sino que también las semillas de cáñamo son ricas en proteínas y aminoácidos, una opción más a los omega- 6 y omega- 3 contenidos en el salmón.
La inclusión de estos ácidos grasos derivados de las semillas de cáñamo previene de las enfermedades cardiovasculares y reduce los riesgos asociados a los cánceres de mamá y colorrectal según el ‘National Institutes of Health’.
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Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.