Este hombre, de 60 años, salió de prisión a principios de 2018 tras una condena por estar en posesión de 5.100 plantas de cannabis sativa, y ahora lo han sorprendido con otras 2.600

La Guardia Civil ha detenido en Lújar a dos individuos por estar en posesión de 2.600 plantas de cannabis sativa. Uno de ellos es el pastor de 60 años arrestado en julio de 2016 tras encontrarle 5.160 plantas de ‘maría’ cultivadas en una de las zonas arrasadas por el fuego en la Sierra de Lújar en julio de 2015. El ahora detenido se dedicó en aquellos entonces a ‘reforestar’, si se permite el término, una de las áreas calcinadas por las llamas en aquel gran incendio. Apenas cinco meses después de aquel arresto, la Policía Nacional de Motril lo volvió a detener por estar en posesión de otras quinientas plantas de marihuana. Después de esta última incautación, el juez lo mandó a prisión y posteriormente fue condenado con sentencia firme a tres años de prisión.

Este hombre, ya casi con la edad de jubilación a sus espaldas y oriundo de Gualchos-Castell de Ferro, ha encontrado en la marihuana su modus vivendi. Conoce la Sierra de Lújar como la palma de su mano y utiliza bancales muy escondidos y poco o nada frecuentadas para cultivar cannabis sativa. El supuesto modus operandi del pastor ha sido muy similar en todas las ocasiones en que lo han sorprendido con cannabis sativa. El detenido, que conocía la Sierra de Lújar por su actividad profesional de pastor, aprovechó uno de los lugares donde conducía al ganado para crear un sistema de riego por goteo que llegaba a cada una de las plantas y que conducía por los dos bancales donde había plantado el cannabis. La primera vez, los agentes de la Guardia Civil necesitaron tomar pastillas de Ibuprofeno para soportar los fuertes dolores de cabeza que les generaban las 5.160 plantas alijadas. En esta nueva ocasión, la cantidad se ha reducido casi a la mitad con 2.600.

El pastor recurre a lugares recónditos de la Sierra de Lújar para cultivar cannabis sativa

El trabajo de esta última incautación comenzó en julio, después de que los agentes de Motril descubrieron que en el barranco del Hornillo, en el término municipal de Lújar, había una importante plantación de cannabis sativa al aire libre. Desde entonces, los guardias del instituto armado han estado vigilando la plantación hasta que lograron averiguar quiénes estaban detrás de la misma. En la fase de explotación de la operación, la Guardia Civil localizó 2.000 plantas de cannabis sativa de aproximadamente un metro de altura y 600 de casi dos metros de altura. Todas contaban con un sofisticado sistema de riego por goteo. En esta operación han participado agentes del Área de Investigación de Motril y agentes de la Guardia Civil de Castell de Ferro.

Otras 2026 plantas en Otura

Por otra parte, la Guardia Civil de Santa Fe ha desarrollado una operación antidroga en Otura en la que se han intervenido 2.026 plantas de cannabis sativa en tres viviendas de esa localidad. Los investigadores averiguaron que en tres domicilios de esa localidad los actuales inquilinos pudieran estar dedicándose al cultivo de marihuana de interior. Se desplegó un dispositivo en torno a ellos y los agentes tras registrar las viviendas descubrieron 750 plantas de cannabis sativa de diferentes tamaños en la primera, 516 plantas en la segunda y 760 en la tercera.

Los agentes descubrieron que dos individuos eran los responsables de la primera plantación; que otro lo era de la segunda y que una mujer era responsable de la tercera plantación. Los cuatro han sido puestos a disposición judicial en calidad de investigados como responsables de un delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluido eléctrico.

Los operarios de Endesa han colaborado en esta actuación para identificar los enganches ilegales a la red eléctrica.

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Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.