El nacimiento de una nueva semilla se asemeja al nacimiento de una cría de ser humano. No dolerá en absoluto pero el responsable de la nueva vida deberá atender multitud de pequeños detalles antes, durante y después de su existencia. Aquí os enunciamos de manera general algunos temas que no podéis olvidar a la hora de cultivar con un sistema hidropónico.

Texto: Franco Lojacono
Traducción: Máximo García-Bernardo

Esquema HidropónicoEl cultivo hidropónico requiere un alto grado de orden y organización. Es vital hacer una correcta valoración del espacio disponible, los recursos, y sobre todo, del tiempo que podamos dedicar a nuestras plantas.

Tenemos que tener muy en cuenta que las plantas cultivadas en hidroponía son más sensibles a las infecciones que las plantas cultivadas en tierra, donde las bacterias y los microorganismos son parte del medio. El lugar donde esté nuestro cultivo hidropónico debe mantenerse limpio siempre; y deberá ser desinfectado antes de cada cosecha..

Prepara el espacio

Queremos hacer hincapié en que en este momento es importante el equilibrio entre una óptima producción y la funcionalidad. La mayoría de los cultivadores tienen tendencia a volverse avariciosos, llenando el espacio disponible de plantas hasta llegar a un punto en el que no les queda espacio para moverse y trabajar. Si no te puedes mover no podrás observar de cerca la evolución de tus plantas, y no serás capaz de anticiparte a los problemas antes de que estos se tornen importantes.

Preparar el espacio significa tener en cuenta todos los factores antes de empezar a cultivar. Hidroponía significa gestión óptima del agua. Hay que decidir que método vamos a usar antes de empezar: Goteo, Flujo y Reflujo, NFT (técnica nutritiva por film) o Aero Hidroponía. Una vez tomada la decisión debemos adaptar el espacio al método elegido.

Asegúrate de que la infraestructura puede soportar la capacidad de trabajo requerida. Pregúntate cuestiones como las siguientes: Están las tuberías en buenas condiciones, hay alguna gotera que arreglar, necesito mejorar el sistema eléctrico, cuánta agua y electricidad puedo usar sin levantar sospechas.

Preparación del equipo

Asegúrate de comenzar con un equipo y materiales de buena calidad. Ahorrar unos euros en el equipo a la larga puede salir muy caro en términos de calidad y cantidad. Los fallos en el equipo son las causas más comunes de fracaso de un cultivo hidropónico. Hazte una lista diaria de cosas a revisar, esto te ayudará a prevenir errores y olvidos.

Planifica tu calendario

Todos somos meticulosos los primeros días. Pero es importante tener una buena y completa planificación de nuestro cultivo. Para esto es crucial conocer bien las características de las variedades que estamos cultivando, de manera que podamos planear bien la nutrición y la duración de la fase floración de la planta. Si tienes una sala de floración permanente tendrás que construir un sistema de cultivo continuo, con plantas listas para florecer tan pronto como la cosecha previa termine.

Genéticas

Es primordial elegir nuestra genética con extremo cuidado. Hay muchas compañías de semillas que venden híbridos F1 con poco o ningún valor genético. Quédate con las de bancos importantes, que te garanticen variedades lo más puras posibles.

Aire

Mantén la calidad del aire bajo control. Una sala de cultivo óptima debe usar un sistema automatizado que asegure la temperatura y humedad relativa adecuadas para nuestras plantas. Los sistemas de cultivo hidropónico permiten a los cultivadores tener temperaturas más altas de floración, dando así mayor producción por metro cuadrado, pero al mismo tiempo mayores probabilidades de que se propaguen las plagas y el moho. El flujo de aire debe ser regular y abundante. La regla es que el aire nunca es poco mucho. El aire ayuda a fortalecer el tallo de la planta en su crecimiento. El enriquecimiento del aire con CO2 ha probado ser eficaz en la producción industrial, pero no es para nada recomendado en salas pequeñas de cultivo por su coste y los peligros para la salud de las personas que conlleva.

La Luz

La planta de cannabis debe recibir unos 1100 watios de luz para desarrollarse en todo su potencial. Debemos medir la luz frecuentemente, y reemplazar las bombillas antes de que se agote su vida útil. El espectro de luz es importante para que la planta active sus componentes psicoactivos. Los cultivadores experimentados saben bien como combinar diferentes tipos de bombillas para tener un completo espectro que sea el mismo de la luz solar.

El medio, el agua y los fertilizantes

La elección del medio es muy importante. El sustrato más usado hoy en día es la lana de roca por su flexibilidad y facilidad de uso. En la página web de la revista podrás ver en el número 2 de la misma la información sobre los principales sustratos usados en hidroponía. El agua debe ser controlada constantemente. La calidad de esta es diferente en cada zona, incluso en partes diferentes de una misma ciudad. Conocer el contenido mineral del agua, su Ph y su EC (electro-conductividad) es esencial para así proporcionar a las plantas la nutrición adecuada. En caso de duda, un test de laboratorio siempre puede realizarse a un costo razonable, pero tu compañía suministradora o tu Growshop te pueden dar esta información también

Los fertilizantes deben proporcionar el espectro completo de nutrientes que necesitan las plantas. Mantén el Ph bajo un control estricto porque es más importante que el propio sustrato. El Ph debe permanecer entre 5,5 y 5,8 mientras el nivel de EC se debería mantener entre 1,2 y 1,8. Niveles más altos de EC no mejorarán la producción de resina y pueden poner en riesgo de intoxicación a tus plantas.

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.