Mi padre tiene un glaucoma producido por una elevación de la tensión en el ojo. Me estoy planteando proponerle que fume cannabis, ya que he leído que funciona bien para este tipo de problemas. También querría saber si el cannabis puede usarse como colirio para tratar el glaucoma.

El ojo humano se divide en varias cavidades, dentro de los cuales se encuentran distintos líquidos. Explicado de una forma simple, el ojo vendría a ser una cámara cerrada (podemos considerarlo como un balón), cuyo incremento de presión puede transmitirse a la parte posterior, donde se encuentran las células nerviosas responsables del sentido de la vista. Estas células pueden verse afectadas cuando se incrementa la presión, lo que en casos graves puede llevar a la ceguera. Existen varios tipos de glaucoma , pero en la mayoría de los casos aparece este incremento de presión en el ojo. En muchos casos no aparece dolor u otros síntomas acompañantes y la enfermedad se manifiesta lentamente en forma de disminución del sentido de la vista.

A lo largo de la historia de la medicina se han usado distintos tipos de fármacos para tratar este problema. Hay muchos medicamentos que actúan sobre la presión intraocular pero en oftalmología se prefieren aquellos fármacos que actúan directamente sobre el ojo. Es decir, en la mayoría de los casos es preferible utilizar colirios ya que producen menos efectos secundarios a nivel del resto del organismo. Por ejemplo, ante una conjuntivitis la vía de administración más eficaz y segura es la ocular (colirio) y sólo ante aquellos casos muy graves o particulares se utilizarían antibióticos por vía oral, ya que los riesgos y efectos secundarios son mayores.

El cannabis disminuye la presión intraocular, pero eso no es suficiente para considerarlo útil en el tratamiento del glaucoma. La mayoría de los datos de investigación que sugieren su eficacia proceden de estudios realizados en los años 70.El National Eye Institute de Estados Unidos realizó en 2003 un detallado estudio sobre el tema y llega a la conclusión de que no existen pruebas sobre la eficacia del cannabis en el tratamiento del glaucoma. El efecto del cannabis sobre la presión del ojo parece mantenerse poco tiempo como para hablar de un efecto terapéutico. Es improbable que el hecho de fumar cannabis tenga repercusiones negativas sobre la enfermedad, pero no existen evidencias sobre su efecto médico. Existen opciones disponibles más seguras, más estudiadas y, sobre todo, con menos efectos colaterales.

Con respecto al uso como colirio también existen varios inconvenientes. En primer lugar en cada variedad de planta aparecen cannabinoides en distintas concentraciones, por lo que parece muy complicado seleccionar las variedades más adecuadas. Además habría que utilizar solventes adecuados, calcular las concentraciones necesarias y aplicarlo en condiciones de esterilidad absoluta. La mayoría de los cannabinoides no atraviesan la conjuntiva y los colirios comerciales parecen opciones más limpias, cómodas y eficaces. En el momento actual se realizan investigaciones con anandamida (principal representante de los endocannabinoides) y ciclodextrinas que aumentan su solubilidad, así como con cannabinoides sintéticos como el HU211. Pero usar un psicoactivo potente sólo para tratar un glaucoma parece comparable a matar moscas a cañonazos.

Acerca del autor

Fernando Caudevilla (DoctorX)
Médico de Familia y experto universitario en drogodependencias. Compagina su actividad asistencial como Médico de Familia en el Servicio Público de Salud con distintas actividades de investigación, divulgación, formación y atención directa a pacientes en campos como el chemsex, nuevas drogas, criptomercados y cannabis terapéutico, entre otros.