Hola queridos y apasionados “fumones”, en el número anterior hemos comenzado la serie de “Variedades apropiadas para elaborar derivados del cannabis”. En él, hemos hablado de las variedades más adecuadas para elaborar Charas y hachís marroquí.

Por Suleiman Benidriss

Hoy indagaremos sobre el origen del Chastri egipcio y Madjoum del extremo oriente, abordaremos el método de elaboración que se sigue para hacer estos dos derivados del cannabis y hablaremos de las variedades de plantas más apropiadas para realizar ambos productos.

Hacia el final del siglo XVIII Napoleón Bonaparte formó una expedición de soldados y científicos con rumbo a Egipto con el objetivo de conquistarlo. En ese periodo, Egipto era una provincia del desaparecido Imperio Otomano (Turquía en la actualidad). La pretensión de Bonaparte era doble, por un lado quería asestar un duro golpe al comercio inglés en las Indias Orientales y por el otro pretendía seguir satisfaciendo la esencia imperialista de su dominio anexionando más territorios a Francia.

Tras anexionarse Malta, desposeyendo a la Orden de Malta de su señorío, después de luchar contra los mamelucos (Batalla de las Pirámides el 21 de julio de 1798) y de librar la famosa batalla del Nilo contra los británicos (Batalla de la Bahía de Abukir el 1 y 2 de agosto de 1798) Napoleón acomete innumerables reformas sociales por todo Egipto demoliendo las estructuras feudales e imbuyendo al pueblo de un poder renovado.

Semillas de nuez vómica
Semillas de nuez vómica

Es en este marco en el cual aparecen un gran número de expediciones científicas y de descubrimientos, uno de los más renombrados sería la Piedra de Rosetta. Algunos científicos y estudiosos como René-Nicolas Dufriche (apodado como Desgenettes) o Silvestre de Sacy comenzaron a estudiar el cannabis, dando lugar a las primeras investigaciones científicas y estudio de campo sobre marihuana. Jean-Baptiste Lamarck, naturalista francés, fue el primer científico en describir esta planta una vez que sus colegas se la enviaron desde Egipto a Francia.

En la actualidad, Egipto es denominado como República Árabe de Egipto y cuenta con más de  83 millones de habitantes. Su geografía se puede definir a través de desiertos y, cómo no, del majestuoso Nilo en todo su recorrido hasta su desembocadura en el Mediterráneo, dejando tras de sí un fértil delta de ubérrimos cultivos.

Parece estar bastante bien documentada la utilización de cannabis en el territorio correspondiente al actual Egipto desde hace más de 4.000 años. Algunos investigadores arabistas y orientalistas apuntan a la utilización de cánnabis o de sus derivados en prácticas religiosas, asociadas a Sufismo durante el siglo XII d.C. Esta es, por decirlo de manera clara y sencilla, la vertiente del Islam más mística y menos corrompida, es decir, menos interpretada. En esa época, Al-Nāsir Salāh ad-Dīn Yūsuf ibn Ayyūb (Saladino), uno de los grandes sultanes de la historia del mundo musulmán, gobernaba en la región. Su sultanato se extendía desde Egipto hasta Siria, Mesopotamia, Libia, etc.

La historia del cánnabis en Egipto es la historia del hachís que se funde con historias de personajes místicos como el viejo de la montaña y de asesinos profesos y selectivos como los lnizaríes más conocidos por su sobrenombre de los hashshashin que formaba parte del ismailismo chií en su rama nizarí. Su utilización está documentada en cultos religiosos y prácticas espirituales como los de la vertiente sufista y en intereses belicistas y promesas sobre el paraíso como las que Hasan ibn Sabbah hacía a sus asesinos.

Cabeza de adormidera
Cabeza de adormidera

El cánnabis y sus derivados como el dawamesk o el Chastri han estado ahí desde hace mucho tiempo y han sido utilizados en místicas interpretaciones sobre hechos religiosos contemplados desde el prisma del Islam, contribuyendo al tambaleo de regímenes a lo largo de la historia como demuestran los repetidos intentos de asesinato contra el sultán Al-Nāsir Salāh ad-Dīn Yūsuf ibn Ayyūb por parte de Hasan ibn Sabbah y sus hashshashin, que ansiaban modificar la da’wa ismailita-fatimí que predominaba en el El Cairo y así aprovechar el poder religioso.

Entre otros derivados del cannabis que se pueden encontrar en Egipto está, como decíamos antes, el chastri. Es un derivado que, a diferencia de la mayoría, se bebe. Los dos principales ingredientes del chastri son el raki y el hachís pero también será necesario azúcar y hierbas aromáticas que van a variar según el lugar. El chastri es similar al licor español Montecristo de Hachís elaborado por Salvador Costa en los albores del pasado siglo.

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Para elaborar chastri se puede recurrir a cualquier tipo de aguardiente aunque si es de arroz mucho mejor pero puede ser de uva y también de higo. La proporción de licor hachís habrá que ajustarla según gustos pero una referencia inicial puede ser de unos 10 o 15 gramos (si son consumidores avezados) por 1 litro de licor. En cuanto al azúcar, también es relativo al gusto de cada uno. Hay personas que prefieren licores más dulces y a otras esto les empalaga pero podemos decir que de 300 a 500 gramo por litro, si lo preferimos podemos utilizar almíbar. En cuanto a las hierbas podéis utilizar anís estrellado, ajenjo e hinojo, aunque también podemos ponerle salvia o romero. Es conveniente que el hachís no sea comercial pues no deseamos sustancias desconocidas en nuestro chastri. Si podemos evitar hachís tipo charas y conseguir uno con una consistencia a modo de polen, genial.

Lo primero será colocar el raki o aguardiente en un recipiente preferiblemente hermético y opaco, a continuación se le añaden las hierbas y se sella el recipiente durante un mes o dos, cuanto más tiempo más sabor y aroma adquirirá el licor. Pasado este tiempo se retiran las hierbas y se realiza un almíbar hirviendo agua con azúcar y se le añade el hachís troceado o rayado. Cuando la mezcla sea homogénea se añade el almíbar al licor y se remueve con suavidad. Una vez hecho esto, pondremos a reposar nuestro chastri durante al menos un mes. Pasado este tiempo tendremos un deliciosa chastri para consumir con nuestros amigos en alguna celebración especial o quizá en algún momento íntimo y tranquilo.

Hachís
Hachís

Desplazándonos un poco más hacia oriente en países como India, Tailandia, Vietnam, Malasia, Laos, Camboya y en algunos más en donde existen cultivos de opio se produce un derivado del cannabis que se llama Madjoum que es en realidad una mezcla de opio con hachís, estramonio y nuez vómica.

Durante siglos, el opio se popularizo por muchas regiones del extremo oriente y existen constataciones de su uso desde hace unos 5.000 años. Además, fue el motivo de grandes enfrentamientos entre algunas potencias europeas como la británica con china por el control del mercado, conocidos como Las Guerras del Opio (1839 a 1842 y 1856 a 1860). La dinastía Ching se vio envuelta en toda esta guerra de intereses por el control del opio y de su venta pero también de la manufacturación de productos, como las manufacturas que elaboraban los españoles que consistían en la mezcla del tabaco con el opio.

El imperio británico comenzó a cultivar opio en India y a vendérselo a los turcos y a los chinos, cuyas sociedades comenzaron un declive que se reflejaría en graves problemas de salud de la población. El número de adictos era cada vez mayor, mientras que los británicos engrosaban sus cuentas ya que cultivar el opio era relativamente sencillo, se podía vender y canjear ya que era un bien muy preciado porque causaba una gran adicción.

Las Guerras del Opio pueden considerarse como el primer conflicto bélico de la historia, cuyo origen eran las drogas. Fue un preludio de todas las guerras por drogas, por su control y contra los males que llegarían posteriormente a lo largo de la historia reciente. El comercio del opio siguió abriéndose camino gracias a la derrota de China en el conflicto. Puyi, el último emperador de China, quiso erradicar los males que el opio había causado en su pueblo pero fracasó y su dinastía se perdió.

También en territorios como Turquía, Irán, India o Irak se extendió el cultivo de opio. En muchos de estos lugares en donde se elaboraba hachís y se plantaban adormideras. También se realizaban mezclas de enteógenos como el Madjoum.

La elaboración del Madjoum no resulta nada hacedero pues los ingredientes no se consiguen con facilidad. Para empezar, sería adecuado utilizar hachís del tipo charas. Habrá que conseguir un poco de opio, con dos o tres gramos será suficiente. El opio se extrae de la adormidera y sus principios activos son narcóticos y anestesiantes.

 La nuez vómica es más complicada de conseguir pues crece en regiones de lejano oriente y Australia. Este es un árbol perenne de gran tamaño que puede sobrepasar los 14 metros de altura, cuando llega la época frutal produce unas bayas que contienes unas cuantas semillas grisáceas. Lo interesante de este fruto son estas semillas, ricas en alcaloides, con efecto estimulante del sistema nervioso y efecto antagonista del sueño y de los barbitúricos. No obstante, esta sustancia no está exenta de peligros ya que contiene estricnina, cuya dosis letal se encuentra entre los 15 a 25 mg. También existe una presencia de brucina que posee efectos similares a los de la estricnina aunque con una intensidad bastante menor.

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Por último, hemos de hacernos con un poco de estramonio que es una planta de la familia datura y muy fácil de conseguir. En España existen más de 20 nombres para referirse al estramonio algunos de ellos son: antimonio, berenjena del diablo, borregos, burladora, castaña, cenizos, ceñiglos, ceñilos, chumbera, chupadera, espantalobos, estramonia, flor de trompeta, habatopera, hedionda, hediondo, hierba de las coles, hierba de topos, hierba hedionda, higuera infernal, jeyondera, malhuele, tártagos, túnica de Cristo, etc… Esta planta proviene de oriente, de regiones de India y de la antigua Constantinopla.  Era utilizada como veneno letal por los asesinos Estranguladores más conocidos como Thugs que eran una secta presente en India desde el medievo hasta el siglo XIX.

Una vez hayamos recolectado todos los ingredientes podemos proceder a machacar las semillas de la nuez vómica, siempre teniendo muy presentes los índices de toxicidad. Hacemos lo mismo con las semillas de estramonio hasta que queden en polvo. Por otra parte, hay que proceder a realizar la mezcla del hachís con el opio para lo que podemos ayudarnos de un pequeño rodillo y una fuente baja de calor pero constante. Cuando ambos enteógenos se han mezclado y tenemos una sustancia homogénea añadiremos el polvo de semillas de nuez vómica y de semillas de estramonio datura a la mezcla y volveremos a realizar el proceso anterior. Sería conveniente dejar reposar unas semanas el producto final. Si en algún momento decidís realizar Madjoum, recordad que algunos de sus componentes son enteógenos que hay que tratar con mucho cuidado porque sus índices de toxicidad pueden ser letales. El modo de consumo sería quemándolo directamente en pipa con una ascua o realizando una mezcla como hacían los españoles con el opio y el tabaco.

Hasta aquí este acercamiento a dos de los derivados del cannabis que se producen en otras partes del planeta, en este caso el chastri Egipcio y en buena parte del Extremo Oriente el Madjoum. En el próximo número de esta serie “Variedades apropiadas para elaborar derivados del cannabis” nos vamos a introducir en la historia de la elaboración del kif y os dejamos, a modo de anticipo, con un viejo proverbio bereber de mi buena tierra marroquí que reza: “El kifi es como el fuego, un poco calienta pero mucho quema.”

*ARTÍCULOS:

“Aprovechando los restos diarios ¿Qué grinder utilizo?” Parte I y II, Suleiman Benidriss. Cannabis Magazine, números 117 y 118.
Variedades apropiadas para elaborar derivados del cannabis” Parte I, Suleiman Benidriss. Cannabis Magazine, números 119.

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.